Cómo decorar la habitación de los más pequeños

Aprende a crear una decoración divertida y funcional para que tus hijos disfruten estando en su habitación.

05 diciembre 2017 07:42 | Actualizado a 05 diciembre 2017 07:46
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Para un niño, su habitación es su templo, su refugio. Es ese lugar donde encuentra la tranquilidad y se siente seguro y en paz. Por eso, los padres tenemos que estar seguros de que los más pequeños de la casa se sientan a gusto en sus dormitorios.

La combinación de texturas diferentes en el suelo, en las paredes y en las telas que utilices para cortinas, por ejemplo, es clave para no hacer que la decoración resulte un tanto aburrida.

Debemos prestar atención a los muebles que utilizaremos en la habitación, intentando que sean adecuados para la edad y altura de los niños, de este modo evitaremos que ocurra algún accidente, y ellos se sentirán un poco más independientes manejando sus cosas.

Posiblemente, el punto más importante en el que nos debemos centrar mientras pensamos en cómo vamos a decorar la habitación de nuestros pequeños, es el color.

Tanto el color de la paredes, como en las telas, como en muebles y ropa de cama, elegir el color adecuado y sus combinaciones, nos ayudará a tranquilizar a los niños más activos y a estimular a los más tranquilos.

¿Que color debes elegir para las paredes de la habitación de tus hijos?

Como ya sabemos, desde bien pequeños los niños ya tienen sus colores preferidos, saben de qué color quieren su ropa, etc, pero nosotros, para pintar las paredes de la habitación, debemos guiarnos por algo más que por sus preferencias, aunque lógicamente, hemos de tenerlas en cuenta.

Si tus hijos son de esos que no paran ni mientras están durmiendo, es recomendable utilizar colores neutros, como el azul y el verde.

Si por el contrario, quieres dar un pequeño empujón a la actividad de los niños, debes combinar varios colores en las paredes de la habitación. Para estimular su creatividad, puedes utilizar el color naranja, pintando un par de paredes de la estancia,  y resto con un color más neutro, aunque también podría utilizar el mismo naranja con una tonalidad más baja.

No dejemos de lado a los clásicos: el color blanco.

El color blanco proporciona claridad y armonía a la habitación, gracias a la luz natural y sirve para poner orden con el resto de colores que hayas utilizas en las paredes.

Por el contrario, si queremos favorecer la amplitud de la habitación con luz artificial, utilizaremos colores más oscuros, que también harán que la estancia sea más acogedora.

No pienses que la única manera de dotar de color a la habitación es a través de las pinturas. Actualmente existen muchos materiales con los que  decorar las paredes y suelos, incluso con luces de diferentes colores.

Convierte una pared en una pizarra gigante, utiliza coloridas alfombras y combina cortinas con diferentes motivos, como cenefas, y diferentes texturas.

También puedes darle algo más de vida a una pared, pegando sobre el color que hayas elegido, un divertido vinilo decorativo personalizado. Puedes encontrar vinilos infantiles de un montón de diseños diferentes, animales, siluetas, barcos, etc … Busca el que más le pueda gustar a tus niños y convierte la pared donde lo pegues en su pared favorita.

¿La habitación de tu hijos es pequeña? Sigue estos consejos para aprovechar al máximo el espacio

La decoración de una habitación pequeña puede que nos lleve un poco más de trabajo, dado que hemos de aprovechar al máximo su espacio, pero existen muchas combinaciones de colores y de colocación de muebles y camas que nos ayudarán a aprovechar cualquier rincón que tengamos disponible.

Si tenemos más de un hijo y varios han de compartir habitación, la mejor solución para aprovechar el espacio, es sin duda, la tradicional literal. Y decimos tradicional porque se ha utilizado desde hace muchos años, pero en la actualidad hay literas espectaculares, con unos diseños increíbles, que seguro dejarán a tus hijos con la boca abierta.

Si solo has de colocar una cama en la habitación, la ubicación adecuada es pegarla a la pared, de este modo despejaremos al máximo el espacio y crearemos un efecto de amplitud visual de una forma muy sencilla.

Para producir una mayor sensación de profundidad, es conveniente pintar una pared con rayas horizontales, que parecen perderse hacia el infinito y si pintamos otra pared con rayas verticales, serán ideales para contrarrestar techos bajos, ya que dan las sensación de que las paredes con más altas.

Siguiendo estos consejos de decoración, las habitaciones de tus hijos seguro que se convertirán en una zona a la que estarán deseando entrar nada más llegar a casa, donde podrán estudiar con tranquilidad y donde dormirán a pierna suelta soñando con su  próxima aventura, y todo eso gracias a haber encontrado el equilibrio entre colores, texturas y luces.

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