¿Cómo guardar los tejidos y decoración de verano?

Aunque para muchos el verano aún no ha terminado, lo cierto es que hay otros que ya empiezan a ver asomarse el otoño, las rutinas, y la necesidad de comenzar a planear cómo almacenar ciertas cosas que solo se sacan en los meses de verano.

La vuelta de las residencias veraniegas o la puesta a punto de las terrazas de cara a la nueva estación que está por llegar requiere de precisión para mantener impoluto durante el resto de la temporada los tejidos, muebles y decoración y volver a lucirla el próximo verano.
 

Quienes tienen la suerte de tener un trastero o un lugar en su hogar donde almacenar este tipo de cosas saben que es imprescindible contar con armarios de almacenaje, bolsas herméticas e incluso cajas y fundas. Todo ello permitirá guardar en las condiciones perfectas todos esos objetos que se sacan de forma estacional. Basta echar un vistazo para ver que, en los próximos meses, se tirará de las cajas que contienen lo navideño y, quienes lo celebren, antes tienen una cita con la noche de Halloween.

Para los que no tienen esa suerte y necesitan almacenaje en casa, saben que hay webs como Livingo.es que cuentan con un catálogo extenso no solo de productos sino también de marcas que, a través de su escaparate, ofrecen sus productos y, sobre todo, la variedad de opciones para este tipo de necesidad.

Bancos de almacenaje, sofás con cajones, somieres tipo arcón, taburetes con hueco o cajas son las soluciones más habituales, pero sin duda, las fundas de exteriores pueden cobrar gran importancia si no hay dónde volver a guardar en interior los muebles de exterior de terrazas y balcones.

Cada vez los diseñadores saben que las viviendas son más ajustadas en espacio y cuentan con menos espacio de almacenaje en ellas, de ahí que optimicen al máximo los muebles y los huecos que puedan surgir para esconder parte de la decoración temporal.

Comenzando por tejidos, que tras lavarlos pueden meterse en bolsas que se cierran al vacío para ocupar menos espacio y terminando por lámparas, tapices, esterillas de cama o nuevas alfombras, hay que pensar en su conservación durante los meses de frío o, si se repite la climatología de este año, humedad. De ahí que no valga improvisación si se quieren reutilizar y mantenerlos en las mejores y más idóneas condiciones.