Mejores destinos del Mediterráneo para alquilar un barco

07 febrero 2018 12:02 | Actualizado a 07 febrero 2018 12:05
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Navegar es una de las actividades más placenteras que existen, puesto que no solo otorga diversión a quienes la practican, sino también una gran sensación de relajación y paz al verse envueltos por una inmensa cantidad de agua que parece infinita al mismo tiempo en que las gaviotas emiten sus característicos sonidos.

Disfrutar de esta experiencia no acarrea la compra de una embarcación, bastando simplemente con alquilar un barco. Gracias a la existencia de agencias como Nautal puede llegar a ser verdaderamente económico aprovechando descuentos que en ocasiones alcanzan el 40%. Así pues, cualquier bolsillo puede permitirse el desembolso que exige disponer durante un tiempo limitado de un vehículo acuático.

Tanto España como Francia tienen el privilegio de contar con uno de los mejores mares en términos de navegación: el Mediterráneo. En ambos países se encuentran una serie de destinos que, por determinados aspectos, resultan idóneos para disfrutar de la navegación. Es por ello que verano tras verano muchos amantes de las embarcaciones acuden a ambos países con el objetivo de disfrutar de su gran afición.

La primera zona del Mediterráneo que da pie a que la citada experiencia resulte inolvidable en todos los sentidos es Ibiza. Y es que desplazándose pocas millas es posible abarcar una enorme cantidad de calas de aguas cristalinas que desprenden una belleza impagable. Cada vez son más los individuos que se decantan por alquilar Catamaranes en Ibiza u otras embarcaciones en las que sea posible pernoctar, destinando el dinero del alojamiento al alquiler de un barco en el que pasarán íntegramente sus vacaciones.

Esta opción se está convirtiendo en la preferida por familias y grupos de amigos que quieren disfrutar de la mágica isla de las Baleares a su ritmo, gozando de un acceso privilegiado a ciertas zonas que tanto a pie como en vehículo terrestre resultan un tanto complicadas.

Regresando a la península la propia Tarragona es un excelente destino del Mediterráneo para llevar a cabo el alquiler de una embarcación. Uno de los motivos reside en los maravillosos paisajes que pueden ser observados desde el mar, aunque los factores positivos van más allá abarcando incluso las características del agua.

La misma goza de una limpieza que valoran mucho los amantes de la fauna marina. Y no es para menos, puesto que en zonas como l’Ametlla de Mar existe la posibilidad de alquilar un barco durante unas horas con el objetivo de acudir a ciertas áreas y practicar desde esnórquel hasta buceo, deleitándose con el espectáculo de vida que se da cita en las profundidades.

Pero aquí no terminan los destinos englobados dentro de España. Muy cerca de la frontera francesa se encuentra un lugar prolífero para los alquileres de barcos. Se trata de Empuriabrava, la marina residencial de mayor tamaño en todo el mundo y que, de hecho, alberga multitud de negocios que llevan a cabo la mencionada actividad.

El primer atractivo de la zona reside en la disposición de canales navegables cuyo recorrido asciende a un total superior a 20 kilómetros. A 3 nudos o menos es posible disfrutar de una experiencia única, especialmente al llegar al Lago de Sant Maurici en el que las cámaras fotográficas son utilizadas para obtener inmortalizaciones espectaculares.

Pero dicha urbanización de la provincia de Girona no goza únicamente del aliciente sacado a colación, sino también del de estar emplazada en la bahía de Roses, considerada por los expertos como una de las que desprenden mayor belleza. Es inevitable abrir los ojos como platos al abandonar los canales y entrar de lleno en el citado golfo contemplando unas vistas que jamás abandonan las mentes de los privilegiados que se deleitan con ellas.

El Mar Mediterráneo da forma a innumerables lugares que resultan idóneos para navegar no solo en España, sino también en Francia. Una clara muestra de ello es Tolón, la urbe portuaria de la Costa Azul caracterizada por presumir de un enorme atractivo. Y es que más allá de las bonitas y tranquilas aguas que invitan a una navegación relajante con el barco previamente alquilado los pasajeros también alucinan con la majestuosidad que desprenden sus montañas.

Sin ningún tipo de duda dentro del territorio francés uno de los destinos más aclamados por todas aquellas personas que sienten verdadera pasión por los entornos acuáticos es el Valle del Loira. El río puede ser recorrido alquilando barcos especialmente diseñados para tramos fluviales, por lo que la comodidad es máxima durante el transcurso de todo el trayecto.

A la fauna que se da cita en el río Loira y también en su respectivo valle hay que sumar la presencia de una flora que inspira naturaleza, además de una serie de imponentes castillos de los que resulta complicado apartar la mirada. Es por todo ello que se convierte en un destino mediterráneo idóneo para alquilar una embarcación y gozar de una navegación inolvidable.

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