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El cuidado de la salud debe iniciarse desde jóvenes y cuando se llega a una edad avanzada es obligatorio poner mayor atención a este punto. Se hace necesario poner en marcha acciones y rutinas para garantizar un envejecimiento óptimo y saludable.
Cuando ya se pasa el umbral de los 50 años, es importante conocer al detalle el nuevo estilo de vida que se debe poner en práctica. Desde los ejercicios a realizar hasta los alimentos de ingesta necesaria para que los órganos se mantengan funcionando.
Puntos clave a cuidar
Alimentación
“Somos lo que comemos”, este es un refrán muy acertado, porque de allí depende en mayor medida como se comporte el organismo con el paso de los años.
El cuerpo de una persona de 60 años que se alimenta de manera equilibrada, no tendrá la misma respuesta que el de aquella que siempre ingiera bollería, fritos y a coma a deshoras.
Es necesario acudir con un nutricionista que marque las pautas a seguir. Por ejemplo, aumentar la ingesta de fibra para estimular los movimientos intestinales, reducir gradualmente el consumo de sal, eliminar por completo las grasas, y de ser posible solo consumir carnes blancas.
Tensión
Este es uno de los principales enemigos de las personas de la tercera edad. Por lo general, después de los 50 años se empieza a padecer de problemas de tensión y en la mayoría de los casos los pacientes desconocen que tienen esta afección.
Por ello, nunca está demás tener un control diario de los niveles de tensión arterial, hacer un chequeo dos veces al día durante una semana, que permita tener un registro estadístico de las altas y bajas de la tensión.
Dado lo constante que debe ser este control, es recomendable hacer una inversión y comprar un tensiómetro. En el mercado se pueden encontrar de diversos precios, modalidades y funciones, en www.mejorestensiometros.es se tiene acceso a una guía completa de las opciones más accesibles y fáciles de usar.
Ejercicio
La actividad física debe estar presente en el estilo de vida de toda persona que haya pasado de los 50 años, aquí es cuando el cuerpo necesita con mayor énfasis mantenerse en movimiento.
La actividad más sencilla es caminar, como mínimo 30 minutos al día. Si se quiere aumentar la intensidad, es necesario que un geriatra evalúe las condiciones físicas de la persona, para que determine si puede incluir actividades aeróbicas, de pesas o que necesiten de mayor esfuerzo físico.
La mente también importa
Para muchas personas envejecer representa algo negativo y con ese pensamiento comienzan a atravesar su vejez de la peor manera. Lo que los lleva a acelerar procesos de deterioro corporal, solo por tener un enfoque negativo ante la aparición de las canas.
Cuando se presentan estos casos, lo más acertado es buscar ayuda inmediata, generalmente la primera opción es un geriatra, pero lo cierto es que los psicólogos están mejor preparados en esta área y pueden dar una ayuda inmediata y calificada.
En estos escenarios es necesario terapias enfocadas a la orientación y crecimiento personal, bienestar personal y familiar, mejora del estado de ánimo, técnicas de relajación, mejora del autoestima y manejos del trastorno de ansiedad, que en espacios como el Centro de Psicología Aquiles en Vecindario ha ofrecido durante muchos años.
Es mejor prevenir
De acuerdo a los más reciente estudios realizados por la Organización Mundial de la Salud dentro de 30 años, el 20% de la población de todo el planeta estará en la etapa de la vejez, razón más que suficiente para que quienes no tienen más de 50 años comiencen a mejorar su alimentación y rutina diaria.
Las evaluaciones apuntan a que las principales enfermedades que se estarán registrando para entonces en los ancianos serán enfermedades mentales como la demencia y el Alzheimer, además deficiencia en la movilidad y poca durabilidad de la estructura ósea.
Como medida preventiva, los expertos en el área aconsejan, mejorar la alimentación, consumir alimentos alcalinos, ricos en fibras y proteínas, hacer ejercicio constante y mantener la mente activa con la lectura, realizar crucigramas, sopas de letras, entre otras.
Las recomendaciones básicas son:
* Mantener un control médico constante, siendo cada tres meses el periodo aceptable.
* No automedicarse y menos cuando se presenten síntomas de enfermedades o dolencias fuera de lo común.
* Mantener una vida social activa, un factor importante en la vejez es contar con un amplio entorno de familiares y amigos.
* Más allá de una alimentación equilibrada, es importante estar constantemente hidratado.
* Dormir lo suficiente y no solamente durante la noche. Es necesario tomar siestas durante la tarde, en función de que el cuerpo no llegue muy cansado a la noche.
* Tener hobbies o pasatiempos, así como es importante la vida social, los pasatiempos o actividades al aire libre, también juegan un papel importante en el cuidado de la salud en personas de la tercera edad, caminar, bailar, montar bicicleta, hacer teatro o cantar.
