Pon fin a tus problemas económicos de una vez por todas

La crisis económica afectó a millones de personas por todo el mundo y sus consecuencias siguen vigentes hoy en día. Uno de los grandes problemas cuando este período azotó nuestro país, fue la complejidad que sufrieron muchas personas para devolver los créditos y demás deudas contraídas con los bancos y demás entidades. Como resultado, mucha gente entró en listas de morosos, mientras que otros tuvieron que declararse insolvente. Poco a poco el país se ha ido regenerando y hay ciertas alternativas para mejorar nuestra economía personal.

Reunifica todas tus deudas

Hay numerosas deudas que, si no las pedimos con cabeza o directamente nos afectaron ciertos imprevistos como un despido inesperado, se nos acumulan hasta el punto de no poder pagarlas. Este es uno de los grandes problemas a los que nos enfrentamos cada día (la letra del coche, la hipoteca, los pequeños créditos…), por lo que los bancos han tenido que encontrar la mejor solución para lograr recuperar su dinero.

La reunificación de las deudas con hipoteca es una de las mayores alternativas para todos aquellos que tienen demasiadas deudas separadas cada mes. El sistema se basa en unificar todo aquello que pagamos en una sola factura mensual, bajando así el gasto que tenemos.

La principal contra es tener que pagar unos costes de cancelación anticipada con cada una de las deudas. No obstante, es una pequeña inversión que nos hará ahorrar en los meses venideros. Porque la cuota resultante será menor y, en muchos casos, también los intereses.

Para solicitar una reformulación de la hipoteca de cara a hacer todo esto, es necesario cumplir con ciertos requisitos mínimos. El primero de ellos es tener una buena fuente de ingresos y un aval. Además, tendrá que tener la hipoteca amortizada en buena parte de ella y que todas tus deudas sean hacia la misma entidad bancaria.

Si cumples todos estos requisitos, estás de enhorabuena. Tus meses serán mucho más tranquilos gracias a la posibilidad de reunificar deudas (más información aquí).

¿Y si no tengo hipoteca?

Puede que solicitar una reunificación de las deudas sin hipoteca sea algo mucho más complicado, pero tampoco significa que sea imposible. Los bancos, a fin de cuentas, quieren cobrar las deudas pendientes y siempre se puede encontrar la manera de hacerlo.

La forma más sencilla de que esto pase es si el solicitante tiene una vivienda o propiedad a su nombre. Se utilizará esta como garantía y el banco concederá la hipoteca. Pero no hay que precipitarse tampoco, es recomendable contemplar las diferentes opciones que ofrecen otras entidades bancarias.

En caso de no tener dicha vivienda, será tratar de convencer al banco que dé un préstamo lo suficientemente alto como para cubrir todas estas deudas. Pero no siempre será fácil, más bien lo contrario. Aunque hay ciertos conceptos como tener un sueldo alto que pueden ayudarte a reunificar deudas sin aval ni vivienda (más información aquí).

Así pues, si no cuentas con ninguna hipoteca a tu nombre, sea por la razón que sea, lo más probable es que te cueste conseguir la reunificación de tus deudas. Eso sí, con un buen asesoramiento podrás llegar a lograrlo.

Pide un crédito de manera rápida y sencilla

A menudo nos vemos en la tesitura de necesitar un dinero extra para cubrir ciertas necesidades económicas. No obstante, a causa del pasado, muchas veces los bancos nos niegan esta oportunidad. Pero no hay por qué tirar la toalla, existen plataformas online que pueden dar préstamos urgentes sin todos los requerimientos que exigen las entidades bancarias.

Con cantidades que ascienden hasta los 40.000€, estas plataformas se han convertido en la alternativa ideal para miles de personas. No importa que figures en las listas de ASNEF, es decir, en las listas de morosos, estas webs saben que no hay por qué condenar a alguien por un pequeño error del pasado y ponen a la disposición de los clientes el dinero que necesiten.

Se puede escoger la cuota a devolver con bastante tranquilidad. Es decir, no todos pueden hacerse cargo de los créditos solicitados de la misma manera y es muy positivo que se ofrezcan variantes en los plazos de devolución.

Además de todo esto, la documentación a presentar será mucho menor. Por lo que, desde la comodidad de tu sillón, podrás solicitar un préstamo que se hará efectivo en tu cuenta en un plazo de 24 a 48 horas.