¿Qué tipo de piscina te interesa tener en casa para este verano?

El verano está cada vez más cerca y las ganas de disfrutar de un buen clima para darse un buen chapuzón en la piscina son casi incontrolables. Pero si de hecho no tienes aún una en casa y piensas que es un buen plan de inversión durante estos días, presta atención a las piscinas prefabricadas.

10 julio 2019 06:48 | Actualizado a 10 julio 2019 06:54
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Tener una piscina en casa es el deseo de muchos y esto es posible de cumplir gracias a la cantidad de opciones que existen en el mercado. Y es que cuando tenemos en consideración las altas temperaturas que son capaces de alcanzar los termómetros ambientales en verano, nos damos cuenta de que este tipo de obras pasan de ser un lujo, a ser un elemento imprescindible para refrescarnos.

Otro detalle es que esa idea de que para tener una piscina en casa se debía tener un terreno muy grande, pasó a la historia. Hoy, existen miles de casas en toda España que han logrado distribuir muy bien el espacio disponible en sus casas, llegando a disponer de todos sus beneficios, aunque sea algo un lugar algo limitado.

Pero, lo primero que hay que considerar a la hora de avanzar en este sentido, son los tipos de piscinas que existen y sus ventajas según lo que desees para tu caso particular.

Las piscinas prefabricadas

Las piscinas prefabricadas tratan de modelos actuales que resultan mucho más fáciles de colocar y no requieren de tantos trabajos estructurales como ocurre con las piscinas de obra.

Según el tipo de material con qué se hagan, las piscinas prefabricadas pueden venir de fábrica con bloques ya dispuestos para ser instalados, por lo que su trabajo es de poco tiempo, menos de una semana. Aquí se trata de las piscinas de poliéster y de fibra.

También están las de condición prefabricada que son hechas de liner y acero. En estos casos, se tratan de bloques de acero ya listos para ser colocados en los bordes de las piscinas y proceder a culminar la obra de forma más sencilla.

Para tener una idea más clara de cómo funcionan estas versiones, vamos a revisar las  características de las piscinas de fibra que deben su nombre a la fibra de vidrio presente en su estructura.

Lo primero es saber que la estructura de este tipo de piscinas se fabrican en una sola pieza, esto trae como resultado que el proceso de instalación se realice fácilmente, apenas causando molestias en el espacio que se haya seleccionado para su colocación.

Sin embargo, esto también reduce las posibilidades de que las personas obtengan la forma de piscina que desean, ya que vienen listas de fábrica. Lo bueno es que los fabricantes siempre se ocupan de comprender lo que le gusta a sus clientes, y por eso, colocan empeño en crear versiones aptas para todos los gustos.

Aún así, reúnen una importante cantidad de ventajas que vale la pena destacar:

* Son transportables no sólo para su instalación sino también para su reubicación, por lo que si en determinado momento se cambia de casa, podría llevarla al nuevo lugar.

* La combinación de ambos materiales ocasiona que las piscinas sean muy resistentes y con durabilidad a lo largo del tiempo.

* No es necesario gastar una cantidad excesiva de dinero en el mantenimiento.

* En líneas generales, el proceso de construcción es rápido y poco molesto en torno al ruido, por lo que se puede hacer en cualquier lugar sin temor a molestar a los vecinos.

* Tiene un coste mucho más bajo que las piscinas de obra y las prefabricadas de acero.

Las piscinas de obra

Para las personas que desean que su piscina sea tal y como la han soñado, las piscinas de obra son su opción de primera línea. En este caso, también existen dos tipos y el material predominante es el hormigón.

En el primer caso tenemos a las piscinas de obra con liner, éstas cumplen una cierta cuota de prefabricado que se evidencia en los bloques de hormigón para construir el vaso de la piscina. A partir de ahí se procede a un recubrimiento con liner para revestir toda la estructura.

Gracias a que el hormigón viene ya listo de fábrica, es un hecho que se trata de una versión que permite que el trabajo sea efectuado en mucho menos tiempo y sin tantas complicaciones. Sin embargo, esto no complica en ninguna medida la durabilidad de la piscina pues tienen un período de garantía de hasta 10 años.

Por su parte, las piscinas de hormigón son las que se han visto desde siempre, que aún con todas las ventajas de los otros modelos, siempre tienen una numerosa cantidad de beneficios que vale la pena destacar. El primero es que se pueden adaptar a cualquier forma que se le quiera dar, sumado a esto, no existen límites en el tamaño, puede ser tan pequeña o tan grande como se desee.

También son versátiles en cuanto a la colocación con respecto al terreno, esto quiere decir que se pueden estructurar de forma interna en el terreno, o por el contrario, hacerlas elevadas. Aunque existen ambos métodos, el segundo tiende a tener un coste más elevado debido a que hace falta realizar una base de hormigón donde apoyar la piscina.

Otro dato con el que también existe variabilidad es con respecto al revestimiento y la impermeabilización. Lo común es trabajar con gresite, pero gracias a los avances con respecto a estos materiales que se han hecho en los últimos tiempos, se han encontrado muchos beneficios al trabajar con el liner, ya que ofrece una mejor estanqueidad.

Las piscinas resultan una muy buena inversión por varias razones. La primera de ellas es el hecho de que son útiles para refrescarse en el verano, como ya hemos mencionado anteriormente, pero también son un valor añadido para la casa, ya que si en algún momento se va a hacer su venta, se podría conseguir un precio mucho mayor. En casas con niños, resultan un centro de distracción bastante bueno.

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