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La directiva 2002/73/CE del Parlamento Europeo define como acoso sexual como “la situación en que se produce cualquier comportamiento verbal, no verbal o físico no deseado de índole sexual con el propósito o el efecto de atentar contra la dignidad de una persona, en particular cuando se crea un entorno intimidatorio, hostil, degradante, humillante u ofensivo”.
En la actualidad, existen 125 países en el mundo que han legislado contra el acoso sexual en la última década del siglo XX y durante la primera década del siglo XXI. Sin embargo, todavía hay países como Kuwait en los que el acoso sexual sigue siendo legal y está consentido. Por suerte, España, como no podía ser de otro modo, es uno de los países del mundo que cuenta con una legislación al respecto, por la que cualquier persona que siente que sufre un acoso sexual puede defenderse ante la Justicia gracias a los Abogados derecho penal.
Los abogados penalistas son los especialistas en delitos contra la libertad sexual y están especializados en el trámite de este tipo de asuntos relacionados con delitos de acoso sexual. Sobre este tipo de delitos hay que destacar que son muy complejos de tramitar, por lo que requieren la máxima capacidad profesional de un abogado penalista para poder ser llevados con éxito.
Así, el primer paso que habrá que dar para resolver un caso de acoso sexual es, precisamente, contactar con un profesional y abogado penalista para que nos asesore en todo momento. Debido a las peculiaridades que tiene cada caso, se puede producir en un entorno laboral o en otro tipo de situaciones, cada caso concreto requiere una actuación independiente, por lo que el asesoramiento penalista profesional es esencial.
A pesar de ello y de que en España es un delito contra el que se puede emprender acciones judiciales, aún hay mujeres que no denuncian este tipo de acosos, sobre todo cuando se producen en el entorno laboral. Los motivos principales que llevan a ocultar este tipo de prácticas son el miedo a denunciar por sufrir posibles represalias. También influye el miedo de la mujer a sufrir la incomprensión, por parte del resto de compañeros, lo que también incide a la hora de ocultarlo.
En cuanto al perfil de la mujer que tiene una mayor tendencia a sufrir un acoso sexual se encuentra, mayoritariamente, mujeres solas, con dependencia del trabajo y jóvenes. Según los últimos datos hechos públicos por el sindicato UGT con cifras de 2015, en España, entre 2008 y 2015 fueron acosadas sexualmente 2.484 mujeres en el entorno laboral, lo que supone prácticamente un suceso por día.
Por ello y para luchar contra estos casos, según recomiendan desde el Despacho de Abogados como Cormeum Legal, la mujer que sienta que sufre un episodio de estas características debe perder el miedo y denunciar, ya que la mayoría de los acosadores el miedo de sus víctimas les anima a seguir adelante.
En la misma línea, la forma de actuar de los acosadores tiene una serie de pautas en común que una mujer debe tratar de conocer para poder enfrentarse. Así, por ejemplo, los acosadores son tan expertos que hacen que su víctima pueda sentirse mal al transmitirles la idea de que son ellas las que han creado la situación de acoso. Por ello, los acosadores suelen buscar a mujeres más frágiles, desde un punto de psicológico, que puedan caer en su juego.
De ahí la importancia de denunciar siempre que se esté sufriendo una situación de acoso, ya que es la única manera de que la sociedad cambie y se eliminen este tipo de prácticas y abusos sexuales. “Si las víctimas se callan al final están facilitando que los acosadores puedan seguir haciendo lo mismo con ellas y con otras mujeres”, explican desde este Despacho de Abogados especializados en este tipo de delitos.
Sobre las condenas de los casos de acoso sexual, en España la mayoría de ellas fueron resueltas en 2017 con inhabilitaciones de trabajo, órdenes de alejamiento y multas. De las condenas que conllevaron el ingreso en la cárcel del agresor, el 68% fueron con penas de 0 a 2 años. Solo cuatro violaciones acabaron con el detenido entre rejas.
En España cada vez se denuncian más casos de acoso sexual, lo que es una tendencia muy positiva, ya que pone de manifiesto que se está perdiendo el miedo a denunciar este tipo de prácticas. En concreto y según los diferentes Informes de Delitos contra la libertad sexual elaborados por el Ministerio de Justicia, registraron 2.200 denuncias por agresión sexual en 2017.
