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El candidato de JxCat a la presidencia de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha descartado este lunes llegar a un pacto con Aliança Catalana, partido independentista de extrema derecha, tras las elecciones del 12M: «No negociaré nunca con una formación de derecha extrema o ultraderecha».
«Quiero hablar con las propuestas que tengan ganas de construir una alternativa en el marco del Estado de Derecho europeo de respeto a los derechos humanos, donde se sitúan las fuerzas democráticas del mundo, para liberar Cataluña. No negociaré con quien no comparta esto», ha asegurado en declaraciones al canal 324.
Puigdemont ha dejado entrever que quizás hay alguien con un «interés» en «hinchar» a la extrema derecha independentista: «Hablamos -de Aliança Catalana- por encima de nuestras posibilidades».
Ha emplazado al candidato del PSC, Salvador Illa, a que «sea tan claro con Vox» como lo es con Aliança Catalana y le ha reprochado que los diputados socialistas votasen junto a la formación de extrema derecha en el Parlamento Europeo a favor de retirarle su inmunidad parlamentaria.
En relación con el PSC, ha dejado claro dos aspectos: que no piensa negociar con los socialistas tras las elecciones del 12 de mayo y que si Illa fuese elegido presidente con los votos de Vox «sería un presidente legítimo», pero tendría «consecuencias».
«No me sentaré a negociar ni con Pedro Sánchez ni con Illa, porque ellos sabrán qué hacer», ha señalado.
Además, ha asegurado que, si tiene la posibilidad de encabezar la presidencia de la Generalitat, la primera persona a la que llamará será al candidato de ERC, Pere Aragonès: «Tenemos que ir juntos en la etapa que viene en Cataluña. No voy a dejar de decir lo que creo que tengo que hacer en un momento en el que la nación se la juega y nos podemos quedar con el país en las manos».
En estas elecciones, ha apuntado, se puede romper el «empate técnico» que hay entre ERC y Junts dentro del bloque independentista, y ha señalado que ambas formaciones tienen «más comunes denominadores» de los que quieren «reconocer».
«No nos podemos perder en batallitas partidistas en un momento en el que se la juega la nación», ha espetado.
