En estos tiempos en que la política se ha convertido en un intercambio de insultos, en que muchos se escandalizan por el gravísimo delito de buscar la reconciliación con el independentismo, en que unos se llenan la boca con la palabra «felón» y otros tildan de «facha» todo lo que no sea darles la razón sin más. En estos tiempos de sinrazón, el humor es más necesario que nunca. Hay dos programas que lucen ese humor y además saben reírse de sí mismos y de algo tan ‘intocable’ como el máximo mandatario de tu comunidad.
Cachitos es uno de esos programas. Más allá de su selección musical, los rótulos son, una y otra vez, una delicia. El último, la semana pasada bajo una actuación de Miguel Poveda. El cantaor barcelonés parece hermano gemelo de un conocido político. Decía el rótulo: «Si creéis que vamos a bromear con el parecido con Rufián es que no os habéis leído el pacto de investidura». Genial. ‘Autoironía’ y, sobre todo, burla de las críticas de la fachosfera al humor tan sano que ejerce el programa de La2.
El otro programa es Polònia. Hay que ver sí o sí el hilarante gag titulado «Macià i Companys feliciten l’Eugenio pel premi Goya». En el mismo los dos dirigentes de ERC ven desde el cielo la gala de los premios del cine español. Tras el Goya a David Verdaguer por su papel como Eugenio, le piden al gran humorista, también en el cielo, que les explique un chiste. Eugenio tira con bala: «Saben aquell que un niño vuelve de la escuela y dice ‘mamá, mamá, en el cole me llaman Pere Aragonès’ y la madre le dice ‘pero si tú no eres indepe’. ‘Por eso mamá, por eso’». El programa de TV3 se carcajea sin pudor del President. ¿Se imaginan Telemadrid haciendo lo mismo con Isabel Díaz Ayuso?
