El plan del Ayuntamiento para fomentar el «orgullo de ser de Salou» da su primer paso con la creación de una tarjeta ciudadana. El pleno aprobó ayer la ordenanza que guiará el funcionamiento de esta credencial.
El gobierno indica que, por el momento, la tarjeta arranca «definiendo que una persona es de Salou» y que está pendiente de dotarse de servicios. «Se está trabajando, a nivel técnico, en su contenido», detallan las mismas fuentes, que precisan que será un poco más adelante cuando se concrete qué ventajas efectivas comportará el carnet y en qué ámbitos.
En verano de 2024, el ejecutivo salouense contrató, por cerca de 13.500 euros, el servicio de implantación de una tarjeta ciudadana. El objetivo, al menos en aquel momento, era generar un formato que permitiese «la identificación rápida y eficiente de las personas en el acceso y uso de determinados servicios públicos y privados o infraestructuras municipales».
La tarjeta, tal como se concibió entonces, debía «comportar una nueva forma de acceso» a esas prestaciones con la idea de «incorporar sucesivamente beneficios y posibilidades como podría ser el uso del préstamo de la biblioteca municipal, la reserva de instalaciones deportivas y culturales y el acceso a ellas, descuentos o promociones, entrada en zonas restringidas o pago de las áreas de estacionamiento regulado».
El proyecto ya buscaba hacer de Salou una ciudad «ágil y cercana a los vecinos», fortaleciendo los vínculos entre la ciudadanía y la corporación y ofreciendo «servicios que mejoren la calidad de vida de las personas».
En el pleno, ayer, la oposición pidió saber el precio de la tarjeta y eliminar la sanción de hasta 750 euros que se contempla para quienes no comuniquen cambios que afecten a la situación del titular del carnet dentro de plazo. El alcalde, Pere Granados, expresó que el régimen sancionador «se revisará» y señaló, sobre el coste de expedición, que «se verá durante la aprobación definitiva» y que «debe ser algo simbólico para que tenga sentido».
En la misma sesión de pleno se dio el ok definitivo a otra ordenanza más, la que regula por primera vez el uso de las playas de Salou, con ajustes respecto al texto inicial.
