Aleix Coch: «Quería que Tarragona fuera partícipe de este ascenso»
Coch fue decisivo en el ascenso del Sabadell y exhibió la bandera de su ciudad

Aleix Coch celebra el ascenso del Sabadell a Segunda A con la bandera de Tarragona.
La figura de Aleix Coch (Tarragona, 1991) ha tomado un impulso más que relevante en el histórico ascenso del CE Sabadell a Segunda División. Y eso que no hace demasiado, el central tarraconense luchaba, tumbado en una camilla, por recuperarse de una lesión grave de rodilla que le mantuvo casi un año inactivo. Este domingo, en la final del play off de ascenso ante el Barcelona, el defensor de Tarragona vio como tanto esfuerzo quedaba recompensado con un crucial, el del empate ante el Barça B, y el posterior éxito.
Con 28 años, por fin, dispondrá de la oportunidad de saborear el fútbol profesional, eso si su futuro no depara novedades. «Llevo muchos años picando piedra en Segunda B y creo que este ascenso es como un sueño, un premio muy grande para mí», refleja el protagonista, minutos antes de tomar el avión de regreso a casa, después de 10 días frenéticos de play off express en Andalucía.
El cabezazo, que significó el 1-1 en una acción a balón parado, consolidó un curso casi impecable de Coch en el centro de la zaga arlequinada. Desde que en octubre de 2019, en un partido ante el Llagostera, recuperara la titularidad, tras 10 meses lesionado, su técnico, Antonio Hidalgo, le ha entregado total confianza.
A la veintena de partidos que ha completado les ha sumado 3 goles, uno de ellos en el día decisivo, el de la gran final por el premio gordo ante el filial del Barcelona. Néstor Querol culminó la gesta del Sabadell, que regresa a la categoría de plata y al fútbol profesional cinco años después. «Es el gol más importante de mi carrera hasta ahora, aunque espero que llegue alguno más como éste», admite el protagonista.
Coch encendió la luz nostálgica y sentimental de sus compatriotas tarraconenses cuando, en plena celebración, exhibió la bandera de la ciudad, un acto inesperado. «Lo pensé antes del play off, quería que si ascendíamos, Tarragona fuera participe del éxito. Ahora estoy en Sabadell, pero soy de esa ciudad y mantengo mis raíces allí», confiesa. La cantidad de mensajes de agradecimiento fue espectacular a través de las redes sociales. Muchos de esos mensajes los escribieron seguidores del Nàstic, que todavía considera a Aleix como uno de los suyos. Coch se formó en las categorías inferiores granas. «Estoy muy agradecido por los mensajes que he recibido y las muestras de cariño. De hecho no he podido responder a todos todavía», refleja.
Incluso, al futbolista se le ha vinculado con el Nàstic, como uno de los jugadores deseados para reforzar la plantilla de Seligrat la próxima temporada. Este ascenso con el Sabadell deja la situación en el aire. «Ahora quiero disfrutar y descansar. Ya le he dicho a mi representante que hay que respirar un poco estos días y esperar. Veremos qué ocurre».
La larga lesión
La grave lesión que necesitó superar el tarraconense le ha endurecido la piel en su regreso. Ha madurado a marchas forzadas. En enero de 2019, el central padeció en una triada en su rodilla izquierda, uno de los percances más graves que puede sufrir un futbolista. «Soy de los que piensan que las cosas suceden por algo. Cuando reaparecí en Llagostera ya lo consideré como una pequeña victoria, después de mucho tiempo luchando. Es evidente que, cuando me lesioné, ni me imaginaba que, poco tiempo después, iba a vivir un ascenso. Es como un sueño», explica.
El futuro del central cuenta con un camino, por lo menos, esperanzador. Su vida ha dado un giro hacia el éxito. Va a ser padre de su segundo hijo dentro de seis meses y la rodilla ha dejado de dar quebraderos de cabeza. «Por suerte, no tengo molestias y puedo seguir jugando al fútbol con normalidad», reafirma.
Junto al resto de sus compañeros y al técnico, Antonio Hidalgo, artífice indiscutible del ascenso, Aleix Coch celebra el mayor premio colectivo de su carrera hasta el momento. Vienen muchos más.