Una ballena nada con su cría en aguas del Baix Penedès
Hacía 6 años que no había un avistamiento similar
Los primeros avistamientos de rorcual de la temporada han permitido ver a una ballena de la especie con su cría en una zona entre Coma-ruga y Calafell.
La asociación Edmaktub que realiza controles de la especie en el Proyecto Rorcual señala que la última cría avistada fue en 2017. La entidad explica por ello la preocupante situación por la escasa presencia de crías en los últimos años.
Eduard Degollada, de Edmaktub, explica que no hay otras especies de cetáceos con un índice tan bajo de reproducción.
Falta de alimento
La temporada comienza determinada por una climatología de altas temperaturas y falta de lluvias, lo que hace temer una reducción de ejemplares por falta de alimento.
Desde que comenzó la temporada de seguimiento este mes de marzo han habido seis avistamientos destacando el de la madre con la cría. Un 50% de las ballenas vistas son hembras.
Edmaktub ha presentado la memoria de 2022 en la que hubo una gran presencia de rorcuales en la costa del Penedès y Garraf y de otras especies del Mediterráneo desde cetáceos a tortugas y peces que la entidad señala que es una muestra de la biodiversidad de la costa catalana.
Calafell quiere ser un punto de control de los cetáceos como ya lo es el puerto de Vilanova.
La presencia de ballenas en la costa del Garraf no es tanto porque sea un punto de paso, sino porque encuentran alimento por la presencia de cañones submarinos y mejores condiciones ambientales. Algunos ejemplares repiten visita incluso después de dos años.
Edmaktub ha incorporado para sus estudios drones que permiten seguir a las ballenas, un software náutico con predicciones oceanográficas y la instalación de una ecosonda para detectar las masas de plancton.
Destaca el uso de cámaras térmicas para la detección de la presencia de individuos y evitar así las colisiones. La entidad ya alertó del alto riesgo de colisión en la zona con buques mercantes.
Comportamiento
Este año el proyecto Rorcual pretende confirmar tras ocho temporadas de seguimientos, los diferentes comportamientos de alimentación, sobretodo superficial, no descritos hasta la fecha en el Mediterráneo.
Además analiza el seguimiento de individuos, las oscilaciones en su presencia según las variaciones climatológicas y continuar con el estudio del riesgo que supone las colisiones con grandes buques para la supervivencia del Rorcual común.
De marzo a junio es fácil ver nadar en aguas del Garraf y del Baix Penedès al rorcual común el segundo animal más grande del mundo, solo por detrás de la ballena azul y que puede llegar a los 24 metros.