El fichaje de Alan Godoy por el Nàstic de Tarragona pende de un hilo

A veces las historias no siempre tienen finales felices. Alan Godoy no fichará por el Nàstic de Tarragona salvo giro inesperado de los acontecimientos en una operación que se vio muy encarrilada y en la que el optimismo fue total durante muchas horas. Hasta Javi Sanz, director deportivo, lo reconocía en la rueda de prensa de presentación de Migue leal y David Juncà. Él no lo sabía, pero estaba haciendo una premonición de lo que iba a suceder pocos días después: «Alan quiere venir al Nàstic y nosotros queremos que venga, pero tenemos que ser responsables con la situación económica del club. Somos optimistas, pero siendo responsables».

Lo primero que hay que destacar es que el final de esta historia no satisface a nadie. Ni al club, ni al jugador, ni a los aficionados. Alan Godoy quería jugar el Nàstic, el club grana ha hecho mucho para que juegue y los seguidores le han demostrado un cariño pocas veces exhibido a un jugador en Tarragona. ¿Entonces qué ha ocurrido para que no haya habido final feliz?

Lluis Fàbregas, presidente ejecutivo de la SAD del Nàstic, desveló públicamente en Tarragona Ràdio antes del partido ante el Amorebieta los motivos que han roto la negociación entre el futbolista canario y el club grana: «El Nàstic le hizo una oferta acorde a lo que teníamos entendido con el Eldense, con unas cantidades y unas variables y unas condiciones que estaban aceptadas por el jugador. Unas condiciones para esta temporada, para la que viene en caso de ascenso, en caso de no ascenso, con unas cláusulas de rescisión en caso de que un tercer equipo viniese a por él y eso a última hora no ha terminado de cuadrar».

Además, Fàbregas admitió que el acuerdo con el Eldense era total hasta y que fue el contrato con el jugador lo que lo ha bloqueado todo: «El martes pasado se reunió el Consejo con la dirección deportiva y de manera unánime dejó claro que las operaciones no debían afectar al presupuesto y tenían que venir jugadores con la voluntad real de venir al Nàstic y que mejorasen al equipo y que las condiciones del traspaso fueran óptimas dentro de la economía del club. Hay precios de mercado y sabemos que las posiciones delanteras son importantes. El acuerdo con el Eldense existía, pero como pasa muchas veces, las cosas pasan hasta que no están firmadas, pero hasta el día tres hay opciones».

En manos de Godoy

Así pues, esta cláusula del contrato en la que Godoy pedía libertad en caso no ascenso para firmar por otro Segunda ha sido la clave para que la operación esté bloqueada salvo milagro, aunque el presidente de la entidad tarraconense no quiso cerrarle las puertas a Godoy y fue más allá, dejó la pelota en su tejado: «Godoy sabe que esto es casa suya. Aquí sabe que cuando ha estado lo hemos cuidado y ha tenido oportunidades para crecer como futbolista. La palabra la tiene el jugador y no nosotros y si quiere, bienvenido será».

Dani Vidal, técnico del Nàstic, también reaccionó a todo el culebrón Godoy tras el partido frente al Amorebieta afirmando que «la idea es clara, queremos mejorar el equipo pero sin hipotecar el club».