Bienvenido Mr. Fisher: Un mito de visita en SPiSP
El jugador, ahora técnico en EEUU y colocador del histórico plantel que jugó en Europa en el año 2000, se reencontró con su pasado
La figura de Dan Fisher (California, 1976) nunca pasará desapercibida para el CV Sant Pere i Sant Pau. El americano siempre será el colocador que se convirtió en una de las piezas vitales de aquel equipo histórico que consiguió competir en la Copa de Europa allá por el año 2000.
Ya han pasado 22 años de aquello y este ha sido un fin de semana en el que el camino de club y jugador se han vuelto a cruzar. El americano ha regresado con el primer equipo femenino de voleibol de la Universidad de Pittsburgh que dirige desde hace ya unas cuantas temporadas. En el Pavelló de Sant Pere i Sant Pau realizaron un entrenamiento que Alfonso Periáñez, presidente de la entidad. El reencuentro todavía sigue presente en el corazón del dirigente: «Ha sido un fin de semana muy agradable y emocionante. Te diría que nostalgia es la palabra que lo define. Ha Fisher es una persona fantástica y con el que hemos mantenido contacto durante todo este tiempo. Solo estuvo un año, pero siempre le recordamos con cariño».
Este viaje ya se llevaba tiempo cociendo y por fin se ha dado este año. Sant Pere i Sant Pau ha sido la primera parada de una gira europea que les llevará también por Barcelona, donde se medirán en un amistoso contra el FC Barcelona Femenino, e Italia. Fisher pudo dirigir a sus chicas en el Pabellón en el que tantos aplausos generó: «Todavía se acordaba del Pabellón. Dice que está un poco mejor, pero que el suelo sigue igual. De lo que más se dio cuenta es de que habíamos cambiado el techo», explica Periáñez.
El actual presidente y que también lo era en la época en la que Fisher llegó a Tarragona todavía recuerda cómo se fraguó su fichaje por el SPiSP al Diari: «Vino de la mano de Tim Killie, un manager americano muy majo que tenía mucho trato con las universidades y fue una llegada que nos aportó mucho. Formó parte de una generación muy especial».
Una camada que cuenta con jugadores históricos como Gustavo Saucedo, Iñaki Bescós, Christian Vives... A estos dos últimos también les picó el gusanillo de los banquillos y también a Alexandre Aguiló que dirige en Francia. Con Saucedo pudo reencontrase en un conocido restaurante de La Rambla. Alfonso Periáñez fue testigo del momento y todavía sus palabras reflejan la ilusión de ese instante: «Parece que el tiempo no ha pasado. Fisher le preguntaba a Gustavo por todos sus compañeros y que había sido de ellos. Siempre tuvieron una relación muy especial como colocador y opuesto y no pararon de recordar batallitas».