Dioni, el ‘9’ imposible que se le resistió al Nàstic
Ha sido objeto de deseo varios veranos y hace dos estuvo muy cerca de Tarragona. Mañana acude al Nou Estadi como goleador del Baleares
El nombre de Dioni no cae en el vacío cuando se pronuncia en los interiores del Nou Estadi. Siempre que se ha nombrado ha tenido peso sin dejar hueco al eco. El delantero del Atlético Baleares ha estado desde hace muchos años atrás en la lista de arietes que han gustado y mucho en Tarragona. Siempre se la ha valorado como una figura diferencia en la categoría. Probablemente ya no juegue en el Nàstic porque el paso de los años condena, pero eso no quita que el respeto que se le tiene hable por si solo.
Ha habido una ocasión en la que Dioni ha estado más cerca que nunca de ser grana. Fue hace dos veranos cuando era agente libre tras finalizar su contrato en la Cultural Leonesa y los tarraconenses lo tenían como absoluta prioridad en su lista para la delantera.
Las negociaciones se dieron y desde la entidad grana se respiró optimismo para su llegada. El futbolista pedía un salario económico alto, pero en Tarragona se veía como una inversión segura porque pocos delanteros en el barro ofrecen la garantía de goles que Dioni siempre tiene en sus bolsill
La batalla fue feroz y en el fútbol no siempre se termina ganando. Hay que aceptar la derrota y eso es lo que sucedió en el Nàstic. Se intentó con todo, pero Dioni finalmente se decantó por la oferta del Atlético Baleares. Al fin y al cabo era otro proyecto ganador, pero con unas cifras económicas superiores a las que se ofrecían en Tarragona. El Nàstic apretó por él, pero jamás quiso tensar tanto la cuerda. Su contrato en tierras baleares era propio de Segunda División y en ese terreno se decidió no aterrizar.
La realidad es que el paso de los meses ha confirmado que Dioni hubiese sido un delantero que probablemente hubiese elevado al Nàstic a cotas mayores. Aquel año no se tuvo una referencia ofensiva durante toda la temporada y pese a ello se llegó a la final del play off.
Comentan fuentes internas del club grana que no se tienen dudas de que si el Nàstic hubiese contado con un goleador nato durante el año completo se hubiese conseguido el ascenso de categoría. O por la vía de la primera plaza o por la vía del play off, pero no se duda de que el billete a Segunda División se hubiese amarrado.
17 goles el año pasado
Dioni marcó 17 tantos que reflejaron que era uno de esos artilleros que marcan diferncia en una categoría tan exigente como la Primera RFEF. 17 goles que le hubiesen convertido en el máximo goleador con diferencia del conjunto grana y que quizás hubiesen ayudado a conseguir el ascenso. Lo que está claro es que el ariete malagueño no pudo ni soñar con el ascenso y el Nàstic se quedó en la orilla porque el día de la verdad no marcó.
Hoy, Dioni comparece en el Nou Estadi con ganas de refrendar que su relación con el gol no tiene fecha de caducidad. Son seis goles los que suma ya este curso en otra temporada en la que refrenda su olfato goleador. Tiene ya 33 años, pero su capacidad para marcar llegar donde a veces sus piernas ya no lo hacen. Ya saben, el fútbol es cada vez más físico, pero el instinto siempre marca diferencias.