El grupo LUCTA aterriza en Tortosa con una inversión de 25 millones

Se instalará en el polígono Catalunya Sud y generará unos 80 puestos de trabajo

La multinacional catalana LUCTA, de fragancias y aromas alimentarios, construirá una planta en el polígono Catalunya Sud de Tortosa. El grupo ha adquirido tres parcelas de 18.373 metros cuadrados y prevé una inversión de 25 millones de euros para poner en marcha este centro de nuevas tecnologías y producción de ingredientes.

La previsión iniciar es construirlo y ponerlo en marcha en 2024. La obra generará unos ochenta puestos de trabajo y se prevé arrancar la fábrica con 25 trabajadores cualificados, ingenieros, químicos y otros profesionales con grados superiores de formación profesional. También se calcula que se generarán unos 50 puestos de trabajo indirectos. El grupo tiene plantas en ocho países y exportará desde Tortosa a todo el mundo.

La alcaldesa de Tortosa, Meritxell Roigé, ha celebrado la apuesta del grupo LUCTA por construir un nuevo centro de nuevas tecnologías y producción de ingredientes a Tortosa, «una gran oportunidad» sobre todo porque la planta ebrense «tiene un elevadísimo valor estratégico para la multinacional», como han remarcado el director de operaciones, Miquel Escuder, y también el director general del grupo, Albert Xambó.

LUCTA prevé producir desde Tortosa las más de 300 materias primas que son «especialidades» propias de la compañía –por ejemplo, un extracto de aroma de vainilla que se usa en muchas leches de avena-.

El grupo trabaja con más de 4.000 materias primas para producir composiciones de aromas y fragancias alimentarias. «Las vendremos a hacer a Tortosa y las exportaremos al resto del mundo», ha remarcado Escuder. El centro de Tortosa «será radial de suministro» para llegar el resto de empresas del mundo, «una de las joyas de la compañía» donde se harán «los productos de más valor añadido, de química fina» y de innovación, según ha detallado Xambó.

De Tortosa, en el mundo

La empresa tiene actualmente plantas en ocho países, a las cuales se exportarán los ingredientes desarrollados en la capital de Les Terres de l’Ebre. Se trata de los centros productivos y de diseño que LUCTA tiene en China, los Estados Unidos, Colombia y México, y de los centros de distribución y comerciales de Polonia, Brasil y Tailandia.

La planta de Tortosa será la segunda que LUCTA tendrá en Catalunya, donde tiene la sede en Montornès del Vallès (Vallès Oriental), así como un centro de Innovación en el Parc d’Investigació de la UAB en Cerdanyola del Vallès (Vallès Occidental).

Aromas y fragancias

LUCTA tiene tres grandes unidades de negocio. La primera es la de los aromas, muy enfocada a la nutrición humana y animal y la cual prevé que tenga un crecimiento más importante en el futuro. Se trata de ingredientes que se usan en un extenso catálogo de producto, desde alimentos de horno y confitería, a leches vegetales, proteínas alternativas, embutidos, aperitivos, sopas y muchos otros. Entre las curiosidad, el grupo tiene una línea de aromas para café muy «ligada» en los Estados Unidos, donde el 30% del consumo de café es con aromas.

La segunda línea de negocio es la de fragancias de toda clase, desde los ambientadores, a los productos de cura del hogar -detergentes, suavizantes, limpiadores de superficies- hasta los de cura personal –champús, hielos de baños o toallitas húmedas, entre otras-. La tercera línea de producción de LUCTA es la nutrición animal y también algunos productos para las mascotas.

Dos años de trámites y obra

Los contactos del Ayuntamiento de Tortosa con LUCTA para esta nueva implantación industrial empezaron hace un año. La multinacional trabajará este año «el proyecto detalle», una definición constructiva de cada uno de los más de treinta reactores que tendrá la planta del polígono Cataluña Sur y de la obra civil. En paralelo, se iniciará la tramitación de las licencias y la previsión es empezar la obra el año que viene. La construcción del centro se podría alargar más de un año y entraría en funcionamiento el 2025.

Roigé se ha mostrado convencida que «la ubicación y la competitividad» del polígono Catalunya Sud ha sido otro de los factores para atraer LUCTA y ha recordado que hay que ejecutar la ampliación que se trabaja con la INCASÒL, para poder ofrecer 134 nuevas hectáreas industriales, y también para hacer llegar el ferrocarril. «Existe esta demanda para acoger nuevas industrias en el territorio», ha recordado la alcaldesa.