Al padre Pere Martorell, de su monaguillo

Ha fallecido con 88 años el padre Pere Martorell, carmelita descalzo, nacido en Constantí. Su vida sacerdotal ha sido extensa, siempre con un espíritu social, haciendo el bien a todo el que se lo pedía, no sabía decir que no, pero su actividad y su espiritualidad le daban fuerzas para afrontar el día a día con su sonrisa de siempre, y a la pregunta «¿cómo se encuentra?», «yo, muy bien» contestaba, aunque estaba cansado y con ciertas dolencias.

Yo como monaguillo sólo le he conocido desde su llegada como prior a Tarragona desde hace 4 años, pero siempre tuve su confianza, su sonrisa, y para mí ha sido egoístamente un gozo ayudarle en muchas eucaristías, pues mis momentos en la comunidad que gestionaba eran unos momentos de paz, de satisfacción y de alegría. Actualmente acababa de dar el testigo a sus hermanos procedentes de la India, e iba a volver a la comunidad de Lérida donde era tan querido por su gran labor cuando estuvo en ella. Particularmente me ha sorprendido su muerte y me queda, por un lado, el sentimiento de no haberme podido despedir de él por estar fuera de Tarragona, pero me queda la sensación que me verá y sonreirá cada día desde el Cielo y me dirá: «estoy bien, Juan Antonio, mira lo social, mira a quién podemos ayudar». Padre Pere, gracias, gracias, gracias, de su monaguillo. Que Dios le bendiga.

Juan Antonio Salazar

(Tarragona)