Las guarderías para perros, un negocio en auge

Las guarderías para perros es uno de los negocios que más de moda se ha puesto en los últimos años. Uno de los principales motivos de este auge es que cada vez más personas poseen mascotas en casa. Pero, al no disponer de tanto tiempo libre, estos animales requieren de un espacio como las guarderías para interaccionar con otros perros.

Una guardería para perros se ha convertido pues en un entorno propicio para los amantes de estos animales. Además, suelen contar con un equipo profesional especializado, en el que el educador de perros tiene un protagonismo especial para hacer que el animal se sienta totalmente a gusto desde el primer momento.

En una guardería para perros, nuestra mascota podrá conocer nuevas amistades y socializar, relacionarse con otras personas para aprender a respetar e interactuar con otros, no solo con sus propietarios, ejercitarse mientras juegan, disfrutar al aire libre e incluso ser adiestrados por los cuidadores del centro.

¿Guardería u hotel para perros?

Junto a la proliferación en los últimos años de las guarderías para perros, también ha surgido otro modelo de negocio que, si bien resulta algo parecido, tiene un concepto y unas características un tanto diferentes con respecto al primero. Se trata de los hoteles para perros, que también han aprovechado el momento actual para adentrarse en este nicho de mercado.

Los hoteles para perros son establecimientos en los que por lo general el animal se queda allí alojado durante al menos unos días, bien porque sus propietarios se hayan ido de vacaciones, tengan que hacer una mudanza o estén fuera de casa por trabajo.

En cambio, en las guarderías para perros los animales generalmente regresan a casa al final de las actividades del día, funcionando como si de una escuela se tratara y sin que los animales tengan que permanecer a tiempo completo. Por tanto, son ideales para aquellas personas que pasan buena parte del día fuera del hogar y no tienen tiempo para cuidar de sus mascotas.

Sin ir más lejos, y a modo de ejemplo, en cualquier guarderia para perros en Barcelona los animales pueden entrar fácilmente en contacto con otros para realizar actividades en grupo tanto dentro del establecimiento como en el exterior, disponiendo de unos horarios establecidos para ello.

Qué debe tener una guardería para perros de calidad

Una guardería para perros es un lugar especial, ya que debe tener una serie de características para que podamos confiarle nuestra mascota. Además, no todos los perros se habitúan de la misma manera a un lugar extraño, por lo que han de contar con una serie de aspectos muy a tener en cuenta.

Como ya comentamos al principio, es fundamental que disponga de personal cualificado para cuidar de los perros, en especial veterinarios, educadores, auxiliares, etc. Una guardería para perros no puede estar formada por gente a la que simplemente le gusten los animales, sino por personas capacitadas para ofrecer al perro la mejor estancia y saber actuar en diversas situaciones.

En este sentido, es muy importante que la guardería cuente con un servicio veterinario para ofrecer los mejores cuidados médicos al perro si fuera necesario. El hecho de contar con un profesional de este tipo dentro de la guardería será un punto muy importante para que nos quedemos más seguros y confiados de dejar a nuestro perro allí.

Al mismo tiempo, una guardería de este tipo debe contar con la alimentación más adecuada para nuestro perro. Muchos animales están habituados a tomar un tipo de comida especial, y cambiar la alimentación de un animal de un día para otro no es nada beneficioso. Si la guardería es capaz de disponer de la comida que mejor le viene a nuestra mascota será sin duda un lugar de confianza.

Es muy importante también que la guardería disponga de las mejores instalaciones para dejar allí a nuestro perro. Lo ideal es que sus habitaciones sean amplias y que las camas sean mullidas y separadas del suelo. Un espacio que no garantice tanto la seguridad como la comodidad de los animales no será un lugar adecuado para dejarlos.

Paralelamente a esto, las guarderías para perros deben contar con un gran espacio exterior para que los perros puedan correr y jugar a su gusto. Será la mejor manera para que el animal se suelte y no sufra el estrés de pasar un periodo determinado de tiempo en un lugar extraño para él.

Las guarderías para perros, en resumen, se han convertido en todo un negocio en auge. El ritmo de vida que llevamos nos obliga a pasar muchas horas fuera de casa, lo que se traduce en la imposibilidad de contar con una mascota. Sin embargo, este tipo de servicios resultan fundamentales para todas aquellas personas que no pueden cuidar como quisieran del animal.

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