Miquel Antolín: «En Freshly Cosmetics aportamos resultados»

El cofundador de la marca de cosméticos veganos y sostenibles ha explicado su experiencia en El Círcol de Reus

De la ingeniería química a la cosmética y, de allí, al éxito. En resumidas cuentas, esta sería la trayectoria de los fundadores de Freshly Cosmetics, «una marca de innovación en cosmética natural, vegana», relata Miquel Antolín. Es uno de los fundadores de esta marca de origen reusense y esta tarde ha pasado por El Circol de Reus para cerrar el curso de ‘Beer & Business’, el ciclo en el que se da altavoz a jóvenes emprendedores del territorio. Tenía que acompañarle Mireia Trepat, también fundadora, aunque al final no ha podido asistir.

El proyecto nació en 2016 y su trayectoria ha sido de rápido crecimiento. Primero, a través de su propio canal online y, desde 2019, con una expansión con tiendas físicas en ciudades como Barcelona, Madrid, Valencia y Londres. La marca está presente en unos 25 países y con previsiones de seguir creciendo.

Detrás hay todo un trabajo minucioso y, sobre todo, científico e innovador. Aunque, quizás, la ingeniería química está alejada de la cosmética, la parte científica de estos jóvenes ha sido esencial para el desarrollo de Freshly Cosmetics. «En las últimas décadas, el sector se ha decantado más por el marketing, pero nosotros siempre lo hemos abordado desde un punto de vista muy científico, aportando valor a los productos», y basándose en la efectividad. «No es una cuestión perceptiva, sino que mostramos unos resultados clínicos», subraya Antolín.

Como destaca el cofundador de Freshly Cosmetics, una de las claves del éxito es «ser un producto de mucha calidad», pero también lo es «la distribución digital, el lenguaje, la proximidad con los clientes», añade. En este sentido, cabe recordar que Freshly Cosmetics nació en el mundo digital, donde creció a través de sus propios canales.

«Siempre intentamos detectar las oportunidades del mercado y, en 2016, ser digital era una estrategia ganadora», recuerda Miquel Antolín. Y es que en ese momento, «prácticamente no había marcas de cosmética en el mundo digital». Con la pandemia, la tendencia empresarial ha sido migrar hacia este mundo digital «y vimos que se reducían los alquileres y quedaban muchos locales vacíos y lo aprovechamos. Vemos lo físico como una oportunidad muy grande», expone, a la vez que recuerda: «Lo que se dice es que las marcas ganadoras son las que tendrán el modelo híbrido: digital y físico», y en ello están.

Por otro lado, la proximidad con los clientes es otra de las claves, teniendo en cuenta que «hacemos desde la formulación, a la distribución al cliente final, sin intermediarios». Esto permite a la marca una comunicación muy ágil, «trasladando al cliente todo lo que la formulación aporta, como también lo que nos comenta el cliente a la formulación».

Lo que empezó como un proyecto de emprendimiento en 2016, partiendo de la elaboración de productos de cosmética natural que hacía la madre de Miquel, se ha convertido en una marca reconocida internacionalmente con ganas de seguir creciendo. Quieren productos cada vez más innovadores, con apertura en nuevos mercados, pero también se apuesta de forma importante en I+D en packaging, con el fin de dar solución a los envases de un solo uso.