En marcha el proceso para configurar el proyecto de APEU de Les Gavarres

La agrupación de interés económico -impulsora de la iniciativa- está ahora presentando el proyecto a los operadores del parque comercial. El Ayuntamiento, a favor de la propuesta

La agrupación de interés económico (AIE) Les Gavarres de Tarragona pone toda la maquinaria en marcha para poder convertirse en un Área de Promoción Económica Urbana, más conocido como un APEU. Para que nos entendamos, la única agrupación comercial que hay en Les Gavarres quiere acogerse a la ley de los APEUS –impulsada por la Generalitat– para conseguir la implicación de todos los operadores del parque comercial. El objetivo es establecer un acuerdo de colaboración público-privada entre el Ayuntamiento y los empresarios de Les Gavarres. De esta manera, será más fácil luchar por las principales reivindicaciones del colectivo. Entre ellas, la mejora de la jardinería, la eliminación de los tótems publicitarios o la ordenación del tráfico en el parque. Para todo ello será necesario un convenio que marque los compromisos de la administración, a cambio de una cuota por parte de las empresas que operan en esa zona. El proyecto empieza a andar.

En su día, Les Gavarres ya no se constituyeron como una asociación comercial normal y corriente. Apostaron por una agrupación de interés económico (AIE), que cuenta con unas características especiales, como por ejemplo, que quienes forman parte de la agrupación están obligados a contribuir económicamente. El problema es que, en los últimos tiempos, solo el 50% o menos de los operadores de Les Gavarres forman parte de esta AIE. El resto se beneficia de la implicación de unos pocos.

En el momento en que se aprobó la ley de los APEUS –a finales de 2020–, la AIE vio en ella una oportunidad para cambiar el modelo de gestión. Antes de continuar, definamos brevemente lo que es un APEU. Se trata de una zona urbana delimitada, donde el sector empresarial colabora con la administración municipal para promover de forma conjunta la dinamización de la zona.

La relación entre ambos se regula a través de una ley. «Es una entidad tutelada por el Ayuntamiento, donde permite a los empresarios negociar de tú a tú las principales demandas con la administración», explica el responsable de proyectos de la Cambra de Comerç, Jordi Cáceres. De hecho, la Cambra acabará siendo la gestora del APEU de Les Gavarres.

Cuando se constituye un APEU es necesario crear una comisión paritaria entre Ayuntamiento y empresarios para determinar un convenio de colaboración, con un plazo de entre 3 a 5 años. En esta especie de hoja de ruta se establecerán cuáles son los compromisos de la administración y de cuánto será la cuota que deberán pagar los operadores.

¿En qué punto estamos ahora?

La semana pasada, los responsables de la agrupación de interés económico –entidad que ha activado el APEU– se reunieron con el departamento de Comerç del Ayuntamiento de Tarragona para conocer su grado de apoyo a la propuesta. «Vieron con buenos ojos la iniciativa, cosa que es muy importante, ya que la administración tiene un papel clave en este nuevo modelo de gestión», asegura Cáceres.

Ahora, la AIE se encuentra en una fase crucial para el proceso. Los responsables están explicando el proyecto al resto de operadores de Les Gavarres, y conociendo de primera mano sus necesidades. Al fin y al cabo, serán ellos los que tendrán la última palabra. «La intención es que sea un convenio donde participen todas las actividades económicas del parque comercial. Que sea participativo es clave», comenta Cáceres.

El proceso administrativo

Cuando el proyecto esté redacto, será el momento de presentarlo a registro del Ayuntamiento. Es entonces cuando se inicia el proceso administrativo. El consistorio tendrá dos meses para pronunciarse sobre si está de acuerdo en tirar adelante el APEU. Se formará la comisión paritaria –como una especie de grupo de trabajo– para marcar obligaciones y derechos de ambas partes del trato. El Ayuntamiento deberá comunicarlo a todos los operadores de Les Gavarres –actualmente son 47–, y estos podrán hacer las alegaciones que crean convenientes. Después será el turno de la convocatoria de votaciones. Para que los trámites puedan continuar, serán necesarios dos factores: que voten al menos un 50% de las actividades económicas (empresas) que hay en Les Gavarres, y que estén a favor, como mínimo, la mitad de estas.

Si se llega hasta aquí, el último paso es que la propuesta se someta a votación en el plenario municipal. «Si todo va sobre lo previsto, creemos que un APEU se puede activar en cuatro o cinco meses desde que entra a registro», explica el responsable de proyectos de la Cambra de Comerç.

La principal característica de un APEU es que, tanto si el operador está de acuerdo con el convenio como si no lo está, estará obligado a pagar la cuota que se establezca, siempre que se apruebe este modelo de gestión. De no hacerlo, recibirán una sanción. De esta manera, la implicación y los beneficios serán iguales para todos.

Peticiones

Ramon Rull es el actual gestor del parque comercial y de ocio Les Gavarres. Asegura que esta fórmula de los APEU está costando mucho implementarla en Catalunya. «Siempre pasa lo mismo. El problema del asociacionismo es que hay unos pocos que tiran del carro y muchos que se benefician. Esta ley busca poner fin a esto», explica Rull. Entre las virtudes del APEU, el gestor de Les Gavarres asegura que «cuando consigamos llegar a un acuerdo, tendremos una fuerza importante, tanto a nivel de músculo financiero como a la hora de negociar las cosas para el parque».

«Ahora, cualquier cosa que pedimos a la administración parece que nos estén haciendo un favor», dice Pedro Pulido, el presidente de la agrupación de interés económica de Les Gavarres. Algunas de las reivindicaciones que defienden y que esperan poder resolver son que se mejore la parte de jardinería del parque comercial, que se eliminen los tótems publicitarios que hay en solares públicos y que tapan la visibilidad, que se mejoren las conexiones de transporte público, las zonas de aparcamiento y la señalización. «Tenemos la esperanza de que con el APEU tendremos más fuerza y conseguiremos mejoras importantes», acaba Pulido.

Por su parte, desde el Ayuntamiento, el concejal de Comerç, Dídac Nadal, muestra su apoyo a la iniciativa de la agrupación y defiende que «los APEU son los instrumentos más adecuados para tirar adelante una zona comercial. Lo importante es que sea la iniciativa privada quien los impulse». Nadal asegura que un APEU puede ser una manera «de revertir y mejorar la situación de Les Gavarres».