La subida de las pensiones duplica las jubilaciones en Tarragona

Récord en altas de pensiones en la provincia. La revalorización del 8,5% de 2023 compensa las penalizaciones por las anticipaciones. Un nuevo jubilado: «Me retiro antes y cobro más»

Ferran, trabajador del Institut Català de la Salut (ICS) en Tarragona, ha adelantado seis meses su jubilación. Se iba a retirar en junio pero lo hizo, finalmente, el 29 de diciembre, con 64 años y medio. Cambió de planes de la manera más inesperada, en un viaje de placer a Sant Sadurní con amigos que hizo en septiembre, como es costumbre. «Un compañero que tramita jubilaciones me dijo que tenía mucho trabajo. Me dijo: ‘A la gente del 58 le está saliendo mejor jubilarse ahora’. Entramos en mi perfil de la Seguridad Social y lo comprobamos’», explica.

Entonces Ferran hizo cuentas. «Jubilándome seis meses antes me penalizaban con un 3,82%, pero como las pensiones iban a subir en 2023 un 8,5%, me salía a cuenta. Iba a cobrar 45 euros brutos más al mes. Así que no lo dudé. Yo tenía en la cabeza irme en junio pero lo he adelantado y me sale a cuenta. Ya está bien, son lugares que quedan libres para que los aproveche otro».

Ferran no fue el único que hizo eso. El año 2022 acabó con un boom de jubilaciones inédito. Las 599 altas de ese mes en la provincia duplican el saldo del mes de diciembre anterior (286) y baten cualquier registro previo, según los datos de la Seguridad Social. Tanto las jubilaciones de los hombres como las de las mujeres se han doblado, en ese repunte final del año provocado por las revalorizaciones. Mercè Puig, secretaria general de CCOO en Tarragona, sostiene que «hemos detectado un aumento en el territorio derivado de ese incremento de las pensiones del 8,5%, ya que mucha gente ha hecho cálculos y lo pidió».

Puig añade, además, que «en la Seguridad Social hubo un pequeño atasco en un momento dado, alrededor del mes de diciembre». Esa revalorización del 8,5%, basada en fórmulas que contemplan lo que sube el IPC, ha sido un aliciente para que muchos hayan optado por dar ese paso. «Comenzó a correr la voz y todo el mundo empezó a mirarlo. La penalización que te ponen te compensa y muchos lo han adelantado, porque la pensión les quedaba igual o incluso les subía yéndose antes», explica Mercè Puig.

«Recibo muchas consultas»

Fina Méndez, abogada especialista en Derecho del Trabajo y graduada social, explica que «recibo muchas consultas, también por el hecho de que la normativa se endurece cada vez más, con una edad de jubilación alargada hasta los 67, personas muy cansadas y que piensan que todo el sistema va a ir a peor, y de ahí que decidan, si pueden, jubilarse antes». Méndez detecta, además, que «muchos optan por jubilarse anticipadamente porque el incremento compensa la penalización que puedan recibir».

Joan Llort, secretario general de UGT en las comarcas tarraconenses, admite que «tiene toda la lógica hacer cálculos y, si se puede, adelantar la jubilación si sale más a cuenta, porque igual te sale mejor que hacer un convenio con la Seguridad Social, aunque hay que ver en cada caso».

Victoria Muñiz, de la plataforma Pensiones con Dignidad en Tarragona, sostiene que «el que tiene la opción de prejubilarse lo hace en cuanto puede», aunque matiza: «El aumento no te garantiza nada, porque te pueden subir y bajar después». La pensión que se acabe cobrando es determinante aunque, según Muñiz, muchos optan por seguir trabajando porque no les queda más remedio: «Muchos se quieren jubilar antes pero no lo hacen porque necesitan el sueldo para ayudar en casa y compensar los salarios precarios que tienen muchos jóvenes».

Cada vez más pensionistas

La pensión media de jubilación de esas nuevas alta se situó en enero de 2023 en 1.629 euros en Tarragona, un 15% más que la que había en diciembre del año pasado. La derivada de todo ello es que el número de jubilados y pensionistas sigue creciendo. En febrero había 157.026 pensionistas en la provincia, 40.000 más que hace 20 años. Hay un total de 176.416 pensiones. De ellas, el 64,6% son de jubilación.

«El que puede intenta jubilarse lo antes posible antes de que cambien las condiciones y que vayan a peor», indica el economista tarraconense Rafael Muñoz. Narcís Castanedo, hasta el año pasado director del Institut Vidal i Barraquer, se jubiló no por la revalorización al alza, aunque sí aprovechando una situación favorable a su perfil: «Los funcionarios que aprobamos las oposiciones antes de 2011, cuando tienes 30 años cotizados, al cumplir 60 ya te puedes jubilar, y es lo que muchos hemos hecho».

Proceso de transición

Buena parte de estas situaciones enlazan con la actual reforma de las pensiones recién aprobada y que debe garantizar la sostenibilidad futura del sistema para las próximas décadas. «Estamos en un proceso de transición y eso hace que muchas personas puedan hacer cálculos y que les salga mejor jubilarse antes de lo previsto, aunque es complicado generalizar y hay que ir mirando caso por caso», indica Josep Lladós, profesor de los estudios de Economía y Empresa en la UOC.

El objetivo es que los retiros prematuros sean cada vez más escasos. «Una de las líneas con la nueva reforma es penalizar progresivamente las prejubilaciones, desincentivarlas y dar incentivos para que la gente atrase cada vez más la edad», indica Lladós.

En este boom de jubilaciones recientes influye la revalorización. «La pensión se ha protegido frente a otros aspectos del coste de la vida, porque es lo que se ha acordado, y al final es un mecanismo de equidad», indica Lladós. El economista ve con buenos ojos el nuevo modelo, al menos en su punto de partida: «Era algo indispensable en términos de justicia social, que va en la dirección adecuada pero ya veremos si acaba siendo suficiente, de momento sí lo es». Lladós admite que «se está yendo hacia un equilibrio, eliminando los límites de cotización e introduciendo factores de corrección, de solidaridad, haciendo que contribuyan más los salarios más altos».

Para el docente de la UOC, «hacemos un gasto más generoso en pensiones pero a cambio pagamos más impuestos, porque se aumenta lo que se paga por cotizaciones, sobre todo a cargo de las empresas. Para proteger las pensiones se aumentan los ingresos». De paso, en uno de los retos más inminentes, también se contribuye a proteger las pensiones que se pagarán a la generación del ‘baby boom’, «que a la práctica es la que ha contribuido a levantar y a sostener el estado del bienestar», en palabras de este experto. De esa forma, las pensiones pasarán de suponer el 12% del PIB al 14%. «Llegaremos a cifras similares a las de otros países del entorno», explica Lladós.

La queja ha partido esta vez por parte del sector empresarial, algo a lo que responde el profesor. «Los empresarios dicen que se está penalizando el factor trabajo pero pensar a 20 años vista que la competitividad pasa por los salarios es equivocarse. En mi opinión, la clave está en aumentar la productividad», zanja Lladós.

Temas: