«Si tardamos un minuto más Theo nace en la patrulla»

Theo Sebastián tenía más prisas por llegar al mundo de lo que sus padres pensaban. Tiene dos hermanos mayores: una niña de cinco y un niño de dos años, así que a su madre, Ana Lucía, la situación no le pillaba por sorpresa. Como con el segundo niño fue dos veces al hospital y la ‘regresaron’ a casa, esta vez decidió esperar un poco más.

Pero el ‘poco más’ se alargó porque había que esperar a que una amiga llegara a la casa para ocuparse de los hermanos mientras la pareja se iba al hospital. Ricardo, su padre, explica que «estamos solos en Tarragona, no tenemos familia aquí».

Cuando finalmente salieron hacia el hospital, Ana Lucía ya tenía contracciones tan intensas que apenas podía caminar. Eran las cuatro y media de la madrugada del pasado sábado.

«Los encontramos literalmente en el medio de la calle, en un paso de peatones. Vimos que caminaban muy despacio y nos acercamos a ver qué pasaba», recuerda el sargento J.D Herreries.

Ricardo, el padre de Theo, explica que acababan de llamar a la ambulancia. Le hacían muchas preguntas y él estaba tan nervioso que apenas atinaba a explicar lo que pasaba. «Somos muy creyentes, ¿sabe? Así que le pedí a Dios que nos ayudara. Justo en ese momento llegó la patrulla. Fueron nuestros ángeles».

El coche policial pasaba por el sitio, la calle Prat de la Riba, en medio del operativo que se despliega por las fiestas de Santa Tecla. Esa noche había actos tanto en la Part Alta como en la Part Baixa.

Sin tiempo que perder

Tanto el sargento como el cabo A. Bru, que le acompañaba en ese momento, son padres, así que les bastaron unos instantes para evaluar la situación y darse cuenta de que el parto era tan inminente que no daba tiempo ni de llamar a una ambulancia. Así que subieron a la pareja en el coche, pusieron las luces y en nada se plantaron en el Hospital. «Si tardamos un minuto más el niño nace en la patrulla», dicen.

Ricardo recuerda que en el trayecto los tranquilizaron en todo momento. «Le decían a mi mujer que ella era valiente, que todo iba a salir bien. Fueron muy empáticos».

Cuando llegaron al Hospital de Santa Tecla la mujer fue atendida inmediatamente. No dio tiempo ni siquiera de llegar al paritorio. A Ana Lucía la llevaron a la sala de monitorización, donde le quitaron el pantalón y allí mismo nació Theo. Todo salió bien, así que ayer mismo les dieron el alta.

Protección internacional

Ricardo no sabe cómo agradecer el comportamiento de los agentes que aparecieron en el momento exacto. «Es esperanzador saber que hay personas así, que son tan profesionales, tan humanas que no necesitaron conocernos para ayudarnos».

La familia, originaria de El Salvador, está en Tarragona dentro de un programa de protección internacional. «En esta ciudad nos hemos sentido acogidos y queridos. Entienda que yo tuve que salir huyendo de mi país de un día para otro porque la policía no supo o no pudo protegernos», señala Ricardo.

Al día siguiente del nacimiento la pareja de agentes fue al hospital a ver si estaban todos bien y a conocer a Theo. Su padre inmortalizó el momento con el selfie que acompaña esta noticia.

Ni el sargento ni el cabo, con 18 y 30 años de servicio en la policía local, se habían encontrado nunca en una situación así, pero Herreries reconoce que «es de los servicios más gratificantes que he hecho». Y apunta que en el día a día atienden todo tipo de situaciones y no siempre son las que la ciudadanía tiene en mente: «Desde el abuelo que se ha caído y no abre la puerta hasta una olla al fuego... Estamos para todo».