Nunca antes un búnquer había acogido a tantísimas personas con el único objetivo de reír, pasar un buen rato y desconectar del mundo exterior. De hecho, la Sala August del Palau Firal i de Congressos de Tarragona ya parece un refugio, porque en el momento que bajas sus escaleras y ocupas tu butaca estás bajo tierra y un tanto escondido del resto de la humanidad. Cartel de entradas agotadas desde hacía meses y muchas, muchísimas ganas de pasar un rato con estos tres personajes que se han convertido en un referente del humor catalán. Lluís Jutglar Peyu, Jair Domínguez y Neus Rossell son los presentadores de El Búnquer, el programa que Catalunya Ràdio emite y que, por primera vez, ha decidido salir de su agujero para pasearse por diferentes ciudades, 10 en total.
El ex presidente de la Generalitat de Catalunya Lluís Companys fue el personaje protagonista en Tarragona y durante más de dos horas se desgranó su vida y milagros para saber, desde que nació en el pueblo de Tarròs (Lleida) y hasta que murió fusilado, cómo fue su lucha para proclamar la República Catalana.
Por supuesto, contado todo siempre en clave de humor, a pesar de narrar una historia real y dura de un hombre que estuvo en la cárcel en varias ocasiones, que perdió a sus amigos y compañeros de lucha también fusilados por mercenarios y que acabó muriendo en manos de sus enemigos.
Llega un punto que escuchando a Peyu y Jair el público ya no sabe qué parte es real y qué parte inventada, porque el guión está tmuy bien elaborado. Lo que si deja bien claro el equipo de El Búnquer es el gran trabajo de documentación que se hace sobre el protagonista de cada capítulo y como estos showmans intercalan momentos escenificados que provocan la carcajada en el patio de butacas.
En todo momento se va entrelazando la realidad con la ficción y también con la actualidad, porque hablar de la República Catalana de Lluís Companys y no hacer referencia al 1 de octubre es impensable en el guión del programa. Los presentadores no paran de bromear asegurando que «a historia se repite y que cada vez la proclamación de independencia es más corta y todo es más surrealista».
Una vez terminado el recorrido por la historia de Companys, se incorpora al escenario Neus Rossell, quien propone un juego entre los asistentes para ganar un lote de productos.
El azar saca al escenario a dos chavales de Tarragona y l’Espluga de Francolí y una vecina de Batea y después de una tanda de preguntas de cosas que se han contado en programas anteriores el premio es para el chaval de l’Espluga que se va feliz del escenario por el premio y conocer a los presentadores.
Llega ya la parte final del espectáculo y que da la posibilidad al público, que por cierto llega de muchísimos puntos de la provincia, de preguntar todo aquello que se le pase por la cabeza y entre las preguntas se hacen algunas como: ¿Cuál es vuestro equipo de futbol favorito?, ¿a qué partido político votáis?, ¿tenéis alguna anécdota escatológica?, etc... A lo que, por supuesto, Peyu, Jair y Neus contestan lo que les parece, siempre en clave de humor y yéndose por la tangente.
El colofón final lo pone Neus Rossell con la canción creada para la ocasión y que mediante un sistema de karaoke canta con el público; el tema, claro está, habla también de Lluís Companys.
El programa de radio se ha llevado al teatro para que miles de personas puedan disfrutarlo en directo y, de momento, ya ha pasado por Vic, Manresa, Esparraguera y Girona; y que seguirá, después de Tarragona, por otras ciudades como Figueres, Lleida, Sant Cugat del Vallès, Sabadell y Barcelona. En el Palau de la Música Catalana se pondrá punto y final a esta gira que ha consolidado el cariño y la admiración del público.
El formato se ha adaptado al teatro y ha recibido el cariño del público catalán
