Por si quedaban dudas, el vestuario del Nàstic demostró con palabras y hechos que está con Dani Vidal «a muerte». Así lo reflejaron en el verde en los dos goles y posteriormente en la zona mixta del Nou Estadi. Marc Fernández, uno de los veteranos, y Mario Rodríguez, el héroe de la victoria, respaldaron públicamente a su entrenador. Fueron firmes en sus palabras y quisieron transmitir calma y felicidad con ellas.
«Habrá ocho o nueve equipos que pueden estar en play-off, tenemos que estar tranquilos. La celebración lo dice todo. Dani es el entrenador para este Nàstic», afirmaba Marc Fernández sin tapujos.
El futbolista reaparecía tras tres semanas en el dique seco y lo hacia feliz, aunque todavía consciente de que debe coger ritmo tras la lesión: «Veníamos de semanas complicadas y hoy el equipo da esta versión hasta el final, así es este equipo. He sentido que me faltaba ritmo, pero todos los que hemos salido hemos dado el máximo. Me alegro por Mario, que estaba tocado».
Mario Rodríguez, autor del gol del triunfo en el descuento ante el Tarazona, también respaldó a Dani Vidal y reconoció que ese gol le da la vida a un equipo que lo necesitaba para recuperar la sonrisa tras la debacle en Salamanca: «Lo suyo sería rematar el trabajo antes, pero este gol después de las últimas semanas nos pone muy contentos. Lo necesitábamos. Hay partidos que cuesta más, en casa somos fuertes. El camino es éste. Somos una familia dentro del vestuario» .
Por último, reconoció que el gol y su dedicatoria era para sus amigos de toda la vida: «La celebración es para mis amigos».