Las posibilidades de ascenso de la UE Valls aumentan, con el incremento de equipos en los grupos de la Tercera RFEF, que contarán la próxima temporada con 18, según los acuerdos tomados en la reunión de presidentes, celebrada en Sevilla, presidida por Luis Rubiales, en la antesala de la final de la Copa del Rey para garantizar la viabilidad del fútbol no profesional.
En la reunión de trabajo con los presidentes de las federaciones territoriales, se anunciaron varios acuerdos que afectan al fútbol no profesional y sus clubes. Estos acuerdos serán elevados a la Comisión Delegada en su próxima reunión.
En la Tercera RFEF, después de meses de trabajo en coordinación con las territoriales y autonómicas, se ha acordado por unanimidad que la categoría cuente con 18 equipos por grupo a partir de la próxima temporada.
Una vez confirmada la propuesta, supeditada a la aprobación de la Comisión Delegada de la RFEF, continuarán descendidos los tres últimos clasificados: UE Sants, UE Vilassar de Mar y CF Vilafranca, pero deja a la UE Rapitenca fuera de todo peligro y consolidada en la Tercera RFEF, a pesar de producirse el descenso de la UE Olot y AE El Prat, siempre que el FC Cerdanyola logre el más que probable objetivo de la permanencia.
También se salvaría el CF Badalona si se produce el ascenso de un equipo catalán a la Segunda RFEF.
Además del campeón de cada grupo de Primera Catalana, incluso los dos mejores segundos clasificados tienen opción de ascender. El Rubí, mejor segundo con 58 puntos, integrado en el grupo 1, subiría de categoría, y la UE Valls del grupo 3, con 53, también sería un nuevo equipo de la Tercera RFEF, si finalmente Sant Andreu o San Cristóbal logran el ascenso a la Segunda RFEF en la disputa del play-off, y se mantiene el Cerdanyola.
Con la composición de 18 equipos, el grupo V de la Tercera RFEF quedaría configurado la próxima temporada por el Olot y AE Prat, recién descendidos, Peralada, Girona B, Tona, Pobla de Mafumet, Rapitenca, Hospitalet, Castelldefels, Montañesa, Gramanet, Badalona, La Escala, Mollerussa, Reddis, Rubí, San Cristóbal y Sant Andreu, aunque de ascender uno de estos dos últimos, su plaza la ocuparía actualmente la UE Valls, pero aún deberá consolidar su posición en las tres jornadas que restan para finalizar la competición, y el Vic se encuentra a tres puntos del conjunto del Alt Camp.
La incorporación de los nuevos equipos, un total de 36, significará para la RFEF una nueva inversión de más de dos millones de euros en concepto de ayudas. Así, los ingresos de cada club no bajarán a pesar del aumento del número de clubes participantes.
La ayuda media se estabilizará en los 61.000 euros por club, aunque podría alcanzar los 66.000. Permanecerán fijos los ingresos por cada eliminatoria.
