Franc Ponti: «Todo el mundo puede innovar, depende de no tener miedo a equivocarse»

Profesor de innovación en EADA Business School

04 marzo 2024 11:01 | Actualizado a 04 marzo 2024 14:26
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Se define como alguien de centro izquierda pero, en lo económico, se declara liberal. Franc Ponti (Sant Andreu del Palomar, Barcelona, 1961) es doctor en Economia i Empresa (UVic), licenciado en Humanitats (UOC), máster en Societat de la Informació (UOC) y, actualmente, es profesor ‘full-time’ del Departament d’Estratègia, Lideratge i Persones en EADA Business School, en Barcelona.

¿Qué nos puede contar sobre su conferencia en la Cambra de Comerç?

Hay dos conceptos básicos: los errores evitables y los errores inteligentes. Los primeros son aquellos que no se deberían cometer, pero somos humanos y todos nos equivocamos. Tenemos miedo al error, nos hacen sentir culpables. En cambio, los errores inteligentes están relacionados con la exploración de un territorio desconocido. En una situación de incertidumbre te tienes que equivocar porque, de lo contrario, no avanzarás nunca.

¿Los errores inteligentes son buscados?

Sí, porque si no se le llama serendipia, eso que te ocurre sin que lo buscaras. Con los errores exploratorios vamos a ver qué encontramos. El problema es que hay gente que no se quiere equivocar, y si esto pasa en una empresa significa que no está preparada para innovar.

El error sigue siendo tabú en la sociedad.

Es un tema evolutivo. Hemos heredado un miedo histórico de cuando las cosas no salen bien, y continuamos teniéndole miedo al error. Es difícil luchar contra esto y por eso hemos introducido el concepto de la seguridad psicológica. En un entorno de seguridad psicológica uno no tiene miedo de equivocarse porque forma parte del proceso, se tiene una actitud más exploratoria. En una empresa sin un entorno de seguridad psicológica la gente no querrá equivocarse.

¿Cómo se aplica esto al mundo empresarial?

Mi metodología preferida es el ‘design thinking’, es decir, pensar como un diseñador. Necesitas hablar con los usuarios para recoger sus ideas, entender su punto de vista y generar soluciones. No se trata de que el usuario te dé la solución, sino de conseguir pistas sobre el servicio o el producto determinado.

Sobre emprendimiento y liderazgo, ¿qué nos puede decir?

Es una de las bases de nuestra sociedad. Yo me considero más bien de centro izquierda pero soy muy liberal en el sentido de la empresa. Si no hay emprendedores no habrá proyectos. Las empresas innovadoras son necesarias para que reinventen cosas, un emprendedor tiene que ser un poco transgresor, que busque diferentes formas de hacer las cosas y no tenga miedo a equivocarse.

¿Y qué pasa en una agrupación, una entidad, una asociación?

Lo mismo, pero muchas de ellas se han quedado atrás en muchos aspectos, como los partidos políticos. Son muy verticales y así es muy difícil que nazca una idea de provecho. La rigidez y la burocracia rechazan la innovación. Muchas veces el problema de la innovación es la estructura organizativa: si tú tienes una idea y nadie te hace caso al final te cansarás. Se innova en entornos de libertad, las empresas que tienen la voluntad de ser más innovadoras tienden a tener una estructura más plana, circular, con el poder más distribuido y con gente con más autonomía.

¿Se puede seguir innovando siempre?

Sí. Hay una frase muy peligrosa que dice que está todo inventado. No es verdad: sí que puede haber entornos muy saturados pero esto precisamente permite un cambio paradigmático. El ‘back to basics’, a veces también es eso.

¿Qué consejos le da a sus alumnos en EADA Business School?

Que se mentalicen que ni Catalunya ni España están al frente de la innovación en Europa. Se ha mejorado mucho últimamente pero estamos en un terreno entre intermedio y alto donde innovar no es ningún lujo, sino una necesidad. Las empresas necesitan renovarse, pensar nuevas maneras de hacer las cosas. Esta actitud es clave. A mis alumnos les digo que abran la mente para la innovación y que vayan pensando en cambiar el modo de organizar las empresas: todavía hay mucho jefe iluminado

¿Todo el mundo puede innovar? ¿De qué depende?

Sí, definitivamente sí, todo el mundo puede innovar. Depende de no tener miedo a equivocarse y de tener las condiciones para hacerlo. A partir de aquí ya habrá quién será mejor o peor pero esto pasa en todas partes. Todo el mundo es creativo, los humanos lo somos por naturaleza, aunque vivamos en una sociedad que muchas veces nos impide manifestar este potencial.

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