Apartir del próximo 11 de junio, más de 44.000 estudiantes catalanes —4.168 en la demarcación de Tarragona— se enfrentarán a la nueva Prova d’Accés a la Universitat (PAU), que estrena un formato renovado tras años de reformas y adaptaciones. Esta convocatoria marca un récord histórico de matriculados y pone de relieve la importancia de estas pruebas como paso clave hacia los estudios superiores. El nuevo modelo de evaluación, impulsado por la reciente ley educativa y un real decreto, reduce la presencia de preguntas tipo test para dar mayor protagonismo a ejercicios abiertos y de desarrollo, que ahora suponen al menos el 70% de la nota. Así, se priorizan competencias como el análisis, la expresión escrita y el pensamiento crítico, junto a un control más riguroso de la ortografía y una reducción de la opcionalidad en los exámenes. Estas novedades buscan adaptar la evaluación a las demandas educativas actuales, pero su implementación plantea retos importantes. La renovación requiere no solo cambios en el formato de la prueba, sino también una reflexión profunda sobre la enseñanza, la formación del profesorado y los recursos necesarios para apoyar a todo el alumnado. En este sentido, varios docentes han manifestado su preocupación por la rapidez con que se ha llevado a cabo el cambio, señalando la falta de formación y medios adecuados para afrontar la transición.
Esta complejidad en la aplicación del nuevo modelo pone de manifiesto que los cambios en la evaluación deben ir acompañados de un fortalecimiento integral del sistema educativo. Solo así será posible ofrecer a todo el alumnado las herramientas y apoyos necesarios para afrontar con garantías las nuevas exigencias. Para que esta transformación sea efectiva, es esencial fomentar desde etapas tempranas competencias transversales y metodologías activas, apoyadas por un compromiso conjunto de administraciones, centros educativos y familias. La nueva selectividad plantea así un desafío mayor que el examen en sí: preparar a los jóvenes para desenvolverse con autonomía, pensamiento crítico y habilidades comunicativas en un mundo en constante cambio.