Pratdip, un encanto poco conocido
Tarragona es una provincia repleta de atractivos a menudo, si no escondidos, sí al menos poco conocidos por la mayoría de las personas que nos visitan e incluso por muchos de los que vivimos aquí. Me lo comentaban hace unos días periodistas de otras zonas de España en un encuentro celebrado en el Diari. Y no les falta razón; basta salirse de las rutas más tradicionales para toparse con pueblos y rincones llenos de encanto que pueden deparar al visitante una agradable sorpresa. A mí me sucedió el domingo con Pratdip, un pequeño pueblo con sinuosas callejuelas y pasajes casi imposibles, con singulares construcciones y con una gran riqueza en las historias, leyendas y mitos que le hacen a uno sentirse en un lugar especial. Leyendas que uno puede conocer adentrándose en el centro de interpretación de la Serra de Llaberia, un espacio que se halla en el interior de la oficina de información –la amabilidad de la encargada aumenta el hechizo– y que invitan a dar un paseo por la localidad en busca de esos lobos que se mantienen al acecho en diferentes rincones –una actividad ideal para hacer en familia–. Sí, Pratdip, un pequeño pueblo cuidado con un esmero que habla del orgullo de sus habitantes y del que es imposible irte sin una sonrisa dibujada en la cara, bien merece una visita. Se lo recomiendo.

ÁLEX SALDAÑA