Esta tarde, a las 16:00 horas, las alarmas de los móviles han hecho vibrar los bolsillos de cientos de personas en Tarragona, anunciando el inicio del simulacro de riesgo químico que ha puesto a prueba la capacidad de respuesta ciudadana. En la plaza Corsini, corazón comercial de la ciudad con el Mercat Central, el ensayo ha tomado un tinte singular, entre conversaciones, preparativos y decisiones apresuradas.
Los accesos al mercado han sido restringidos, cerrándose todas las puertas salvo la que conecta con la plaza. Algunos, como Vicent Amigó, de 70 años, exrepresentante de futbolistas y exportero del Nàstic, se enteraron del simulacro por la radio y optaron por sacar el coche del parking antes del inicio del ensayo. Otros, como Gonzalo Baquero, excocinero de 75 años, confesaban con serenidad que lo habían leído por el teléfono y que ya sabían cómo actuar.
Cinco minutos después de que llegaran las alertas a los teléfonos móviles, sonaron las sirenas durante unos segundos, y la gente que había comenzado a entrar al Mercat continuó haciéndolo con calma. Sin embargo, muchas personas no sabían que, cuando se acabara la prueba, llegaría otro mensaje y las sirenas sonarían de nuevo. Eso provocó que hubiera una ‘fuga’ pocos minutos después de que la primera sirena dejara de sonar. Quince minutos más tarde, ya con el aviso del final, las personas que quedaban dentro abandonaron progresivamente las instalaciones.
La Fira del Vi se ‘confina’
El simulacro también ‘afectó’ a los preparativos para la Fira del Vi, que tendrá lugar este fin de semana en la misma plaza. La empresa encargada del montaje de los puestos se anticipó al simulacro y llegó a Corsini antes de que sonaran las alarmas.
Al llegar las alertas a los móviles, uno de los trabajadores exclamó: «¡Chicos, que tenemos que confinarnos, que estamos haciendo un Plaseqta!». Posteriormente, han entrado al Mercat. Cuando dejó de sonar la sirena que marcaba el inicio, prosiguieron las labores de montaje.
El ensayo, organizado por Protecció Civil de la Generalitat de Catalunya, forma parte del Plan d’Emergència Exterior del Sector Químic de Tarragona (Plaseqta), y busca afianzar la cultura de la prevención y la seguridad. En Corsini, la jornada dejó una imagen clara: la preparación para los riesgos convive con el bullicio del día a día.