La covid, ahora como una gripe: 10 preguntas, 10 respuestas

¿Podemos dar por finalizada la pandemia?¿O siempre estará entre nosotros y tendremos que acostumbrarnos a convivir con ella?

Cuando aparece un agente infeccioso nuevo en una población de personas que no tienen ninguna inmunidad (porque nadie ha pasado la enfermedad ni se ha vacunado) y ese agente infeccioso tiene capacidad de propagarse de un ser a otro se produce una pandemia , es decir, un gran número de casos que habitualmente se presenta en oleadas. El riesgo de una pandemia es el colapso del sistema sanitario, que haga que los recursos para asistir a los enfermos se vean sobrepasados y que haya personas que no pueden ser atendidas por las estructuras sanitarias. En esta fase las medidas a realizar deben concentrarse en reducir la propagación del agente infeccioso intentando contener el número de casos afectados y, por tanto, deben orientarse al minimizar las vías de transmisión de la infección.

Una vez superada esta fase de pandemia se puede entrar en una fase de endemia, que significa que siguen existiendo un número importante de casos, pero en la que los casos graves pueden ser asumidos por las estructuras sanitarias. En la fase de endemia ya no es tan importante minimizar el número de casos sino que debemos centrarnos en proteger a los más vulnerables para evitar la aparición de casos graves.
Respecto a la covid, actualmente estamos en fase final de la pandemia y evolucionando hacia la endemia, por eso podemos iniciar la relajación de las medidas más restrictivas que evitan la transmisión centrándonos en medidas que protejan a los más vulnerables. Esto es posible porque ahora ya no todo el mundo es susceptible de adquirir la enfermedad (porque las tasas de personas protegidas por vacuna o que ya han pasado la covid es considerable) y además las cepas de virus circulantes generan pocos casos graves o mortales..

Todavía estamos en fase pandémica pero su fin es muy cercano pero seguiremos conviviendo la Covid-19 durante un tiempo en fase endémica.

¿Podemos hacer ya vida absolutamente normal una vez levantadas casi todas las restricciones? ¿O debemos seguir manteniendo algunas precauciones?  

Tanto en fase pandémica como en fase endémica debemos seguir protegiéndonos, pero las medidas y su intensidad o repercusión serán distintas. Actualmente debemos seguir autoprotegiéndonos y sobre todo protegiendo a los más vulnerables (personas mayores, embarazadas, enfermos inmunodeprimidos,...).

¿Qué tengo que hacer si tengo síntomas compatibles con la Covid-19? ¿Informar a mi médico? ¿Hacerme el test, aislarme...?

Según el Procedimiento de actuación frente a casos de infección por el nuevo coronavirus SARS-CoV-2, de fecha 25/03/2022, las personas sintomáticas, deben realizarse un test diagnóstico, y aislarse si éste es positivo , si:

● Tienen 60 años o más, están inmunosuprimidos o embarazadas
● Viven o trabajan con personas vulnerables (centros sanitarios, sociosanitarios y centros con personas vulnerables, ...)
● Pacientes con un cuadro de infección respiratoria aguda de vías bajas que requiera ingreso hospitalario.
● Personas que hayan estado en los últimos 14 días en una región en la que esté circulando una variante de interés o de preocupación que no haya mostrado circulación comunitaria en nuestro territorio.

¿Cómo tienen que actuar a partir de ahora las personas vulnerables?

Las personas vulnerables deben reducir los contactos sociales y utilizar medidas de autoprotección (mascarilla, gel hidroalcohólico, distancia y ventilación) en contacto con personas que no sean de su burbuja.

¿Pueden repuntar los casos a partir de ahora con la desaparición de prácticamente todas las restricciones?

Es posible un discreto aumento de casos aunque es poco probable un aumento de casos graves que requieren asistencia sanitaria especializada o ingreso hospitalario.

¿Se ha debilitado el coronavirus SARS-CoV-2 por la llegadade ómicron en la sexta ola?

La variante ómicron, a pesar de propagarse con facilidad, parece que genera menos casos graves, aunque esto también se debe a los altos niveles de vacunación poblacionales ya que muchas personas tienen cierta inmunidad natural por haber sufrido la Covid-19.

¿Es peligroso no contar todos los casos de Covid-19 y dejar de rastrearlos?

En la actual situación, de baja gravedad y baja transmisibilidad del virus, es un riesgo asumible. Esto no quiere decir que no deben implementarse mecanismos de vigilancia epidemiológica (casos centinela o muestreos poblacionales) para detectar incrementos de transmisibilidad, nuevas variantes más agresivas o incrementos de hospitalizaciones, tal y como ya se está haciendo.

¿Tendríamos que dejar de utilizar la mascarilla en espacios interiores? ¿O es necesario todavía su uso?

La mascarilla ha sido un elemento de autoprotección fundamental, que ha jugado un papel clave durante los inicios de la pandemia al reducir el número de contagios y todavía sigue siendo una pieza clave en situaciones de alto riesgo de transmisión como son los espacios cerrados.

¿Tendremos que seguir poniéndonos recordatorios de la vacuna para mantener nuestra inmunidad elevada?

Si la fase de endemia se prolonga y los títulos protectores adquiridos por las vacunas comienzan a decaer, o bien aparecen nuevas cepas más virulentas, es posible que sea necesario seguir poniéndonos vacunas, como ocurre por ejemplo con la gripe. Pero en estos momentos todavía no disponemos de información suficiente para determinar durante cuánto tiempo nos continuarán protegiendo las vacunas ya administradas ni sabemos si aparecerán o no nuevas cepas.

¿Vendrán más oleadas del SARS-CoV-2? Si es así ¿serán cada vez más débiles o aún podemos sufrir varilantes más virulentas?

Si aumentan los contagios, el riesgo de que aparezcan nuevas cepas aumenta, pero es cuestión del azar que sean más o menos virulentas. No tenemos una respuesta a esta pregunta más allá del mundo de las probabilidades, pero la historia de la medicina nos dice que más tarde o más temprano todas las pandemias se han convertido en endemias y éstas han acabado manteniéndose a baja transmisibilidad o extinguiéndose por el efecto de las vacunas o la inmunidad natural.