El director de Internacional de la Cambra de Comerç de Tarragona, Roberto Barros, asegura que el grupo de empresarios que participaba en la misión comercial que se ha visto atrapada en Libia por el conflicto entre guerrillas «estamos bien». El grupo permanece en la residencia del embajador español, donde fue trasladado este miércoles por la tarde, a la espera de que puedan ser evacuados del país.
Barros ha explicado que ahora mismo desconocen si la vuelta a España será cuestión de días o de horas, ya que «depende de cuando abran el aeropuerto» y las informaciones al respecto son «contradictorias». Pese a ello, este asegura que «tenemos todo el apoyo de la embajada», por lo que el grupo «está bien y animado».
Barros llegó a Libia el pasado lunes día 12 con una delegación de ocho empresarios, de los cuales cuatro son catalanes y los otros cuatro son del resto del Estado. El representante de la Cambra de Tarragona cuenta con una dilatada trayectoria de más de treinta años liderando este tipo de misiones comerciales en la que participan compañías de todo el Estado, que quieren abrirse a nuevos mercados en el continente africano.
La delegación ya había iniciado los primeros contactos y reuniones con empresas locales, cuando de repente se vio atrapada en la ciudad de Trípoli por esta escalada de violencia entre milicias, lo que provocó que las autoridades locales decidieran cerrar los aeropuertos.
El equipo vivió momentos de desconcierto, cuando el lunes por la noche estaba cenando en la zona próxima al Arco de Marco Aurelia y empezaron a escucharse disparos de mortero por la calle, de forma que decidieron refugiarse en el hotel. Las primeras horas las pasaron en el sótano refugiados «para evitar el peligro de una bala perdida». La situación no fue a más y, finalmente, este miércoles por la tarde la delegación era trasladada a la residencia del embajador español.
Barros asegura que «no hemos pasado miedo» y que el grupo «está muy bien y estamos animados». «Nosotros no somos el objetivo. Es un tema entre milicias locales», afirma el representante de la Cambra de Tarragona, quien asegura que algunas de las escenas que ha vivido estas últimas horas «parecen sacadas de una película».
El director de Internacional de la Cambra de Tarragona mantiene la serenidad que le caracteriza y que ha hecho que sin hacer mucho ruido y picando mucha piedra, la Cambra de Tarragona se haya convertido en un referente estatal por sus misiones al continente africano.