La demarcación de Tarragona ingresó, entre los meses de marzo de 2022 y de 2023, un total de 10.823.083,49 euros por la tasa turística. Fueron 9.094.405,12 durante el primer semestre –entre marzo y octubre de 2022– y 1.728.677,60 en el segundo –entre octubre de 2022 y marzo de 2023–. El dato representa un aumento del 28,7% en comparación con los 8.410.046,18 euros que se ingresaron en 2019 y del 97,2% respecto a los 5.486.571,12 euros recaudados en 2021, un año aún renqueante por la pandemia. En 2020, se cobraron 2.038.052,67 euros.
Salou es, con diferencia, el municipio que más dinero percibe por la tasa turística, con 4.478.170,56 euros. También es la segunda localidad en toda Catalunya, solo por detrás de Barcelona. En la demarcación, Cambrils es la segunda zona que más recauda, con 1.474.619,06 euros. Vila-seca cierra el podio con 1.272.717,14.
El ingreso de este año marca un récord histórico en toda Tarragona, según los datos que publica periódicamente el Departament d’Empresa i Treball.
Se llama tasa turística al impuesto creado en 2012 que se aplica al precio de las estancias en los establecimientos turísticos –hoteles, apartamentos, campings, alojamientos rurales, albergues juveniles, viviendas de uso turístico, áreas de pernoctación destinadas a albergues móviles y embarcaciones de crucero turístico– de toda Catalunya. Aunque el impuesto es de carácter autonómico, el dinero percibido se reparte a medias entre la Generalitat y los consistorios en los que se ha generado este gravamen. Lo que se recauda debe reinvertirse íntegramente en el sector turístico.
El interior, destino de invierno
Pese a que, generalmente, se ingresa más en el primer semestre que en el segundo, hay algunos municipios que recaudan más durante los meses de invierno. En Tarragona, son algunos ejemplos las localidades de Mont-ral, Valls, Vimbodí i Poblet, Margalef y Gandesa.
