La Fiscalía y el Ayuntamiento de Barcelona, como acusación particular, piden seis años de prisión para un bombero municipal acusado de haber grabado a varias de sus compañeras con una microcámara que instaló en los vestuarios femeninos del parque de Sant Andreu.
En su escrito de acusación, la Fiscalía y el Consistorio acusan de tres delitos contra la intimidad al bombero, al que el gerente de Seguridad y Prevención del Ayuntamiento barcelonés abrió un expediente disciplinario en septiembre de 2015 y al que posteriormente denunció ante el juzgado de guardia de Barcelona.
La cámara que presuntamente había colocado el bombero José Manuel Z. fue encontrada de forma casual por una compañera del cuerpo en los vestuarios del parque de Sant Andreu el 26 de septiembre de 2015.
En su escrito, al que ha tenido acceso Efe, la Fiscalía sostiene que el bombero colocó supuestamente una microcámara de grabación entre de julio y septiembre de 2015, adhiriéndola con un trozo de velcro debajo de uno de los lavamanos, en el vestuario en el que se cambian de ropa y se duchan las funcionarias.
En el interior del dispositivo, se encontraron varios archivos con imágenes de las bomberas desnudas o en ropa interior, así como otros fotogramas similares que fueron recuperados por expertos en informática de los Mossos d'Esquadra.
Según la información que hoy ha avanzado La Vanguardia, entre las imágenes de la cámara figuraban algunas del propio acusado, en el momento en el que la colocaba, lo que facilitó su rápida identificación.
El bombero está suspendido de funciones y sueldo de forma cautelar, situación que su defensa ha recurrido sin éxito ante el Ayuntamiento, que ha ofrecido apoyo y acompañamiento durante todo el proceso a las víctimas de la grabación y que ha puesto a su disposición los servicios jurídicos del consistorio, según han señalado fuentes municipales.