Los vecinos de L’Arboç que voluntariamente quieran dar de comer a los gatos callejeros deberán disponer de un carnet de alimentador que entrega el Ayuntamiento.
Quienes den de comer a los animales sin esa autorización pueden ser sancionados.
De momento se han entregado 18 carnets. La iniciativa sigue el programa iniciado hace dos años para controlar las colonias felinas, que los animales estén en condiciones y evitar un incremento descontrolado de la población.
Quienes posean el carnet de alimentador recibirán pienso facilitado por el Ayuntamiento para dar de comer a los gatos. Además son los encargados de controlar el estado de las colonias.