Overbooking en el ataque del Nàstic de Tarragona

Los focos apuntaban a Cedric Omoigui para suplir a Álex Jiménez, que cumplía su partido de sanción tras ver la roja directa ante el Hércules, en el frente ofensivo en la visita al Sevilla Atlético. Pero Cristóbal Parralo decidió apostar por Juanda Fuentes en el costado izquierdo y por el retorno de Jaume Jardí a la posición de enganche.

Un cambio de rostro importante para un ataque grana que cuajó una buena actuación ofensiva en tierras hispalenses. Fueron dos goles, pero pudieron ser más y, sobre todo, las individualidades ofrecieron en todo momento una sensación de capacidad de desequilibrio que en otros encuentros se había añorado. Parralo encontró en su cuarteto ofensivo un colectivo que fluyó y se potenció.

Dos bandas peligrosas

Pau Martínez y Juanda Fuentes fueron dos cuchillos por banda. Ambos actuaron a pierna natural y su rendimiento fue firme. El primero marcó su segundo gol consecutivo, mientras que el segundo regaló la asistencia del segundo tanto y fue un martirio para la defensa rival en el costado izquierdo. Allí amenazó de manera constante con su capacidad para darle profundidad al equipo, pero también para asociarse y darle ritmo al ataque grana. Jaume Jardí volvió a disfrutar de la libertad en la zona de la mediapunta y Marcos Baselga cuajó otro partido de desgaste y desahogo en el que el hecho de no marcar no le penaliza.

Con la buena actuación tarraconense comandada por estos cuatro jugadores, no debería haber debate sobre si van a repetir en el partido del próximo domingo frente al Cartagena en el Nou Estadi. Sin embargo, la realidad es que existe el dilema porque ahora Parralo ve cómo le sobra una pieza en el puzle ofensivo. Álex Jiménez vuelve tras sanción y la confianza del técnico cordobés en el atacante murciano es total. Su doble amarilla frente al Hércules no cambia nada y las opciones de regresar a la titularidad están sobre la mesa.

Si Álex Jiménez regresa al once inicial, todo apunta a que Juanda Fuentes volverá a la casilla de salida y Jaume Jardí ocupará el costado izquierdo. No obstante, existe la posibilidad de que el murciano espere esta vez su turno desde el banquillo. Otra posibilidad, menos probable, es que Marcos Baselga o Pau Martínez sean los sacrificados en el once inicial, pero nada apunta a ello.

Sea como sea, el ataque del Nàstic ha sumado un soldado para la causa y recupera a otro. Cristóbal Parralo sonríe porque su puzle ya no encaja, pero siempre existe la opción de cambiar las piezas a lo largo del partido. El conjunto grana suma fondo de armario y eso siempre es una buena noticia.