Escasa participación vecinal en la consulta sobre la laguna surfera de Cunit
Hay 90 opiniones, de las que 74 rechazan el proyecto por su impacto ambiental
En el proceso de participación ciudadana impulsado por el Ayuntamiento de Cunit para que los vecinos expresen sus opiniones sobre el proyecto de crear una gran laguna para practicar surf vinculada a un camping, la mayor parte de las respuestas son contrarias al proyecto.
La consulta pública es obligatoria de manera previa a la elaboración del proyecto. Debe consultarse a los vecinos y organizaciones más representativas que potencialmente pueden verse afectadas por la causa que se pregunta.
El consistorio presentó una breve memoria del proyecto de la empresa Wavegarden con los planteamientos básicos de la implantación del camping, la laguna para surfear y la rehabilitación de la masía de Cal Pla que hay en los terrenos.
Sólo 90 aportaciones
Pese a la trascendencia de la intervención prevista, sólo hubo 90 aportaciones vecinales y mayoritariamente son contrarias al proyecto.
Del total de aportaciones vecinales 16 están a favor del proyecto ya que consideran que sería una singularidad turística, supondría mejoras para el municipio y generaría actividad económica y empleo.
Pero 74 opiniones son contrarias por las afectaciones medioambientales, la pérdida de suelo agrícola y forestal, el consumo de agua de la laguna y una desconfianza del modelo de negocio.
La gran mayoría de estas participaciones contrarias son con el mismo escrito al que se han adherido vecinos y entidades que añaden argumentos de cambio climático y escasez de agua.
Todas las aportaciones vecinales son favorables a la recuperación de la masía, ahora en ruinas y la restauración de los terrenos para usos agrícolas y productivos, pero los contrarios al proyecto señalan que éste no es necesario para esas intervenciones.
Tras ese periodo de consulta vecinal, las valoraciones se trasladan al equipo redactor para que las tengan en consideración a la hora de redactar el proyecto definitivo.
En todo caso la propuesta debe someterse a la evaluación ambiental que deberá concretar las repercusiones ambientales y las medidas que deban tomarse para evitarlas.
Tirar adelante
El Ayuntamiento ya dijo que las opiniones vecinales serían para incorporar sugerencias, pero que la intención es tirar adelante el proyecto, a la espera de los diferentes informes necesarios de la Generalitat.
La intención de os impulsores del proyecto es que pueda estar en funcionamiento en dos años.
En todo caso, más allá de las opiniones de los vecinos destaca el bajo índice de participación pese a ser un actuación de gran trascendencia para los vecinos. Aunque algunos señalan la desmotivación que supone que la opinión popular no fuese decisiva para aceptar o rechazar el proyecto.
Tambiñen consideran que hubo una escasa información para anunciar el proceso participativo.