El día perfecto para los fans de la hamburguesa

Cientos de personas se acercaron ayer al Mercat Central para desayunar o comer en la I Festa de l’Hamburguesa

La Plaça Corsini vivió este sábado la primera edición de la Festa de l’Hamburguesa, coincidiendo con que era el Día Internacional de la Hamburguesa. Se trata de una jornada propuesta por los propios paradistas del Mercat Central que consistió en que los asistentes podían comprar su hamburguesa en las diferentes charcuterías del mercado y un grupo de cocineros las cocinaban en el exterior.

Pere Milà y Bàrbara Albareda ya se comían una buena hamburguesa a las 12.30 horas: «Somos de comer pronto, decían». Sobre la iniciativa, Albareda aseguraba que «nos parece muy bien, es una forma de aprovechar la plaza y dinamizas los comercios del Mercat Central». Por su parte, Milà comentaba que «nos llamó mucho la atención esto de comer en la calle y al lado del mercado». Ambos reconocían que les gusta la hamburguesa, «pero hubiéramos venido igual si hubieran ofrecido otra comida».

Por su parte, los paradistas también estaban muy contentos por la jornada y el ambiente fuera en la plaza. Àngel Roigé, propietario de la Carnisseria Roigé, celebraba que «esta fiesta está muy bien, es una gran iniciativa y todo lo que se haga en el mercado supone una mejora», y añadía que «con actividades así se consigue que más gente venga y conozca el Mercat Central». Asimismo, Maria Virgili, propietaria de la Carnisseria Virgili, destacaba que «se trata de una iniciativa consensuada con todos los paradistas», y señalaba que la jornada estaba teniendo mucho éxito: «Mucha gente ya ha desayunado hamburguesa», decía al mediodía.

A las 12.30 horas, la actividad se animó con el ensayo abierto de la Banda Unió Musical de Tarragona (BUMT). Con todo, el concejal de Comerç y presidente de ESPIMSA, Dídac Nadal, felicitó a los concesionarios por la idea, de la que dijo que es una propuesta «muy interesante y moderna». Nadal concluyó que «es una actividad más que ayuda a dinamizar las plazas y calles, y la gente está contenta y disfrutando de la fiesta».

Eso sí, un sol de justicia obligó a todos los asistentes a buscar la sombra para poder comer a gusto.