El Serrallo se ha convertido en ese fortín que necesitaba el equipo para pelear por la permanencia en la LEB Plata. El Ibersol CBT consiguió su cuarta victoria consecutiva en casa ante un rival directo, el Alginet, al que le arrebató además el basket average. Los seis puntos de la derrota en Valencia quedaron superados por el 84-68 que encajaron en Tarragona.
Boe Nguidjol (12 puntos) y Bright Mensah (17) volvieron a sacar a relucir su potencial ofensivo y el acierto que ha supuesto sus fichajes en el pasado mes de diciembre. A ellos se les sumó un desatado Ferran Torres (17) y Boonyasith, que mantuvieron al equipo en una primera mitad floja del equipo.
Los primeros instantes del encuentro dibujaron el partido que iba a ser durante la primera mitad. Un Ibersol CBT cegado con los lanzamientos de tres y dependiente de la inspiración de Boonyasith; ante un Alginet que encontraba muchas facilidades para anotar en la zona. Y cuando no, sacaba a relucir la muñeca de alguno de sus jugadores más talentosos como Martínez o Nogués. Este último cerró el primer parcial con un triple espectacular sobre la bocina (11-20).
Primero Ilincic y después Verdeguer dominaron la pintura, con canastas fáciles. La baja de Ousmane Ndour, en Senegal por asuntos burocráticos, se hizo notar en la intidimación tarraconense en el poste bajo durante la primera parte.
Al ataque local le faltaba velocidad para poder encontrar pasillos a canasta. La solución fue por lanzar triples con un porcentaje de acierto bajo. Solo Ferran Torres daba una vía de escape a los lanzamientos exteriores. El pívot tarraconense y Boonyasith impedían que el duelo se partiera definitivamente antes del descanso (33-39).
El paso por el vestuario le sentó de fábula al CBT. Cambió la cara totalmente. Saltó a la pista con una enorme confianza y una mentalidad defensiva muy agresiva. El Alginet de atascó. No iba con la misma fluidez y tampoco mostraba los altos porcentajes de acierto de las primeras dos mangas.
El conjunto del Serrallo comenzó a carburar en ataque. Boe y Bright asumieron responsabilidades, con la inestimable colaboración de Ferran Torres. El Tiburón fue de más a menos. En apenas tres acciones, sin salir de la cancha valenciana, con hasta dos rebotes ofensivos logrados tras dos fallos en tiro libres, el CBT empataba gracias a un parcial de 9-0 (44-44).
Los azulados ya estaban lanzados. El mejor jugador de los tarraconenses en la primera mitad Jacob Boonyasith, con algunas molestias físicas, no entró hasta bien entrado el tercer periodo. Justo para poner la puntilla en la remontada. Con Ferran Torres sacando a relucir su baile de pies en la pintura, el CBT cerraba el cuarto por delante en el marcador (55-53).
El Tiburón del Serrallo olió sangre y se puso a devorar la canasta. Ofreció una ‘masterclass’ de cómo debe moverse un jugador por la pintura. Los futuros jugadores del CBT, presentes en el pabellón para vivir después la presentación oficial de la cantera, seguro que tomaron nota. A punto de hacer 36 años Ferran Torres se comió a los interiores de Alginet para dar 8 puntos a su equipo en el último parcial.
Al conjunto valenciano le costó cuatro minutos poder anotar la primera canasta del último parcial. Para entonces, el CBT se había ido a 9 puntos (64-53). La sólida defensa local les dejó sin argumentos ofensivos. Hicieron lo que había estado haciendo el CBT en el primer tiempo, lanzar de tres. Era la única alternativa que les quedaba para no encajar la quinta derrota consecutiva.
Pero la tenía liada, porque los dos fichajes de diciembre, Bright Mensah y Michel Boe, estaban ‘on fire’. 17 puntos anotaron entre los dos en el último tramo para asegurar no solo la victoria, sino el basket average. Un factor a tener en cuenta en una LEB Plata tan disputada.
