Agentes de los Mossos d'Esquadra de la Región Policial Camp de Tarragona levantaron el pasado domingo, veintitrés actas por incumplir la normativa sanitaria. Además, en la misma actuación se detuvo a un hombre, de 19 años, de nacionalidad española y vecino de Barcelona, como presunto autor de un delito contra la salud pública.
Los hechos sucedieron el pasado 23 de agosto, a primera hora de la mañana, durante un patrullaje de agentes de la Unidad Regional de Medio Ambiente (URMA) para prevenir actas incívicos y proteger el medio ambiente en espacios naturales, en especial a causa de la masificación de personas que se está produciendo este verano.
Durante el operativo los agentes se dirigieron al mirador de la Mussara, al término municipal de Vilaplana (Baix Camp), donde encontraron un grupo de personas las cuales bailaban con la música de los equipos de sonido de los vehículos estacionados mientras consumían bebidas alcohólicas, a la vez que ninguno de ellos llevaba la mascarilla sanitaria obligatoria.
Inmediatamente varias dotaciones de tráfico y del área Regional de Recursos Operativos (ARRO), se desplazaron hasta este núcleo despoblado, incluido en el Inventario del Patrimonio Arquitectónico de Catalunya, para dar apoyo.
Los agentes identificaron 23 personas y ocho vehículos. Entre estas, se detuvo a un hombre de 19 años, de nacionalidad española y vecino de Barcelona, como presunto autor de un delito de tráfico de drogas. Este detenido quedó en libertad con cargos el pasado lunes a mediodía después de declarar ante el juzgado en funciones de guardia de Reus.
Así mismo, todas las personas identificadas fueron denunciadas por incumplir la actual normativa sanitaria con motivo de la Covid-19, así como por generar ruidos innecesarios que perturban el normal comportamiento de la fauna en espacios naturales protegidos y que la Ley de Espacios Naturales de Catalunya (Ley 12/1985, de 13 de junio), contempla sanciones que van de los 300 a los 600 €.
