Una clínica dental situada en plena Rambla Nova de Tarragona está siendo investigada por el Juzgado después de que cerrara sus puertas, dejando a muchos pacientes a medio tratamiento. Uno de ellos, una vecina de Bonavista de sesenta años, es la que ha presentado una denuncia contra los responsables del establecimiento. Al parecer, el supuesto dueño del mismo se encuentra en paradero desconocido. El magistrado sí que ya ha tomado declaración en calidad de investigadas a dos de las dentistas que atendían la clínica. Sin embargo, ninguna de ellas ha aportado datos relevantes a la causa.
El Juzgado de Instrucción número 1 de Tarragona ha abierto diligencias previas a raíz de la denuncia presentada por L.L.R., una vecina de Bonavista que vio como no sólo la dejaban a medio tratamiento sino que, además, lo que le habían hecho estaba mal, según ha constatado un nuevo dentista al que ha acudido. El facultativo le ha dado un presupuesto: 4.000 euros. El precio incluye tanto arreglar los desperfectos que le causaron en su boca como ponerle los implantes. Y todo ello para una mujer que cobra una pensión de viudedad de 590 euros al mes. [...]
