El proyecto de la nueva terminal de cruceros sigue generando diferencias. En esta ocasión, el que se ha pronunciado es el portavoz del PDeCAT en el Ayuntamiento de Tarragona, Dídac Nadal, que desde el «profundo aprecio» mostraba su «discrepancia» con el punto de vista expresado por el alcalde vilasecano en los últimos días. Nadal hacía referencia al artículo publicado el pasado día 25 de octubre por este rotativo en el que Josep Poblet afirmaba: «El más elemental sentido de futuro, y ésta es nuestra visión, aconseja aprovechar esta infraestructura (el contradique dels Prats) al lado de la zona turística más dinámica de la Costa Daurada para situar la base de cruceros y no multiplicar el gasto público».
Nadal defiende que los cruceristas deben seguir atracando en la ciudad de Tarragona. Y, en este sentido, incluso lanza una propuesta para su ubicación. El dirigente independentista propone la construcción de la nueva terminal entre los muelles de Reus y La Rioja. «Es una zona que está a escasos cien metros del Serrallo, de forma que mediante una pasarela podría conseguirse que los pasajeros se plantaran en pocos minutos en el barrio marinero», explica el tarraconense.
Cuando el Port de Tarragona está considerando la posibilidad de habilitar la construcción del muelle de Balears para poder incrementar su capacidad a corto plazo, Nadal defiende que «debería estudiarse seriamente esta posibilidad». «Tanto en lo que hace a la eslora como al calado hay espacio de sobra y si tenemos en cuenta la facilidad de acceso al Serrallo sería una entrada de oxígeno espectacular», apunta.
La habilitación de esta solución obligaría a negociar con la naviera que opera desde el muelle de Reus. «Está claro que también hay inconvenientes, pero no son más grandes que los que hubo en su momento en Barcelona, cuando tuvieron que reordenar el puerto», defiende el dirigente nacionalista.
El pasado miércoles el futuro presidente del Port de Tarragona, Josep Maria Cruset, tuvo que pronunciarse sobre el respecto durante su presentación junto al conseller de Territori, Damià Calvet. Cruset defendió que durante su mandato va a imponerse el «consenso». En cambio, el representante del Govern veía con buenos ojos la adaptación del muelle de Balears como solución a corto plazo.
Dídac Nadal lo tiene claro: «No puede ser que nosotros nos quedemos el carbón y que otros se queden con las ventajas». En todo caso, defiende que la Autoritat Portuària de Tarragona debería hacer los estudios económicos para determinal cuál es la mejor opción.