Varias entidades de Reus pondrán a punto sus locales con rehabilitaciones, compartimentación o ampliaciones con el fin de hacerse más competitivas y potenciar así su actividad. Por nombrar algunos ejemplos, la Associació de Jugadors i Jugadores de Rol de Reus (AJJRR) redistribuirá su sede en diferentes dependencias, la Fundació Mn. Frederic Bara arreglará la fachada y el Centre d’Amics de Reus (CAR) ampliará la cocina del bar que alberga, La Mulasseta, y creará espacio de almacenaje.
Todo ello, será posible a través de donaciones, en algunos casos, cuotas de socios y ayudas a las que optan las agrupaciones. El presidente de la AJJRR, Toni Bergadà, hace balance de la actividad de este año: «A pesar de que el pasado enero, comenzamos con la idea de ahorrar todo lo posible, ha sido un año de muchas actividades, no hemos parado». Nombra iniciativas realizadas, como la sesión ‘Tothom a taula!’, una jornada de puertas abiertas dirigida tanto a jóvenes como familias.
«La adquisición de un local propio después de la pandemia (de unos 300 m2) en la avenida de Sant Jordi, supuso también un paso adelante a la hora de organizar actividades y, además, fuera de allí realizamos muchas más», aporta, y destaca la participación de la AJJRR en el Parc de Nadal de Reus. «Todas las actividades que hemos realizado nos motivan a seguir, nos hemos abierto a un público muy amplio y estamos satisfechos; adquirir elementos nuevos para la asociación es, por otro lado, algo que agradece la masa de asociados que tenemos», declara el presidente de la entidad. La AJJRR cuenta con algo más de 50 miembros y es una cifra que «varía según avanza el año».
Inversión de tiempo y material
El propósito de cara al año nuevo, entre muchos otros, es compartimentar el local, «nos gustaría crear dependencias, mejorar aspectos de iluminación, trabajar en la decoración, colocar una pantalla grande en una de las salas, etc.». Lo que quieren es que «los socios tengan un retorno por la dedicación que prestan, que vean que apostamos por mejorar». «Los proyectos que impulsamos, por otro lado, en los que invertimos material y tiempo, todos están subvencionados; de otra manera, no podríamos realizarlos», señala Bergadà.
De para a principios de 2024, comenta el presidente de la asociación, «habrá cambio de junta y renovación de cuotas y como retos de futuro, seguiremos con los numerosos proyectos en marcha que tenemos, como el ciclo de cine de verano, las jornadas de rol, etc.».
Desde la Fundació Bara, el coordinador de actividades del centro, Javier Veraguas, hace repaso de lo realizado durante el año: «Hemos apostado por realizar un plan de comunicación, porque necesitábamos una estrategia para comunicar de puertas para afuera todo lo que hacíamos en la fundación y creemos que hemos hecho ruido y que cada vez nos conoce más gente», celebra. También quieren transmitir su mensaje estéticamente. Por ello, han solicitado una ayuda para la rehabilitación de la fachada: «Es antigua y creemos que si trabajamos en ella puede llamar más la atención». Nombra, por otra parte, el bien que ha hecho el casal de verano, que, en 2024, cumple 20 años; la lotería navideña y campañas como la del Giving Tuesday que, «sumó donaciones e incentivó la implicación de muchos comercios de proximidad con la causa de donar». Estas acciones han motivado nuevas colaboraciones y en materia de donativos, «los ha habido y estamos agradecidos». También preparan una campaña de captación de socios para una «mayor estabilidad económica».
Atender las múltiples necesidades de las familias
Veraguas, aporta, también, que este año han atendido hasta 450 personas. «Siempre que trabajamos con familias, surgen varias necesidades y vamos registrando todas las peticiones. Al final, el volumen de trabajo es considerable. Hacemos hincapié, además, en la importancia de las atenciones individualizadas, que nos dan muy buenos resultados», especifica. De estas, hacen también el seguimiento correspondiente. También respecto a cifras, el coordinador de actividades de la entidad manifiesta que, en el programa de niños y adolescentes, «hemos llegado a atender este año a cerca de 150 usuarios».
Desde el CAR, su presidente, Joan Mª Mallafrè, declara que la cocina del bar-cafetería La Mulasseta, que albergan en la sede –en el llamado Espai Marià Fortuny–, se ampliará algo más de cara al 2024 y «necesitamos espacio de almacenaje, también». «Este 2023, las presentaciones de libros han ido al alza; hemos alojado a entidades nuevas, hay alrededor de cinco y habrá dos o tres más pronto; hemos dinamizado las salidas culturales de socios y la revista Lo Nunci está en un muy buen momento», dice. En 2024, «potenciaremos el Premi de Poesia Catalana Francesc Martí Queixalós, seguirá el ciclo de conferencias ‘Made in Reus’ y nos organizaremos para el 150 aniversario de la muerte de Marià Fortuny».