Policía Nacional ha hecho efectiva la expulsión del territorio nacional de un total de 13 ciudadanos extranjeros a los que les constaban numerosos antecedentes policiales y judiciales, en su mayoría delitos de robo con violencia y hurtos. Estos individuos actuaban principalmente en la comunidad autónoma catalana.
La Unidad Central de Repatriaciones (UCR) en Madrid, unidad policial especializada entre otras funciones, en la dirección y ejecución de expulsiones y devoluciones de ciudadanos extranjeros a sus países de origen, se coordinó con la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de Barcelona, comunicando la planificación de un vuelo fletado para repatriar a ciudadanos extranjeros multirreincidentes y de alta peligrosidad, a dos países diferentes.
A partir de esa comunicación se inició el trabajo policial y judicial en el que se dispusieron los trámites pertinentes para la localización, liberación de causas pendientes, documentación y, en su caso, localización y detención de un total de 13 personas.
De los 13 individuos, nueve de ellos procedían del Centro de Internamiento de Extranjeros de Barcelona, uno de ellos fue expulsado por resolución judicial y tres procedentes de prisión.
En este operativo participaron personal policial de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de Barcelona, las comisarías locales de Manresa y Lloret de Mar, las comisarías provinciales de Tarragona y Lleida y el puesto fronterizo del aeropuerto de Barcelona.
Para el traslado de estos 13 ciudadanos se contó con una dotación policial de 21 efectivos y 10 vehículos policiales, iniciando el trayecto en comitiva, partiendo desde el complejo policial de Zona Franca (Barcelona) y con destino Madrid, donde se procedió a la entrega de los detenidos a la UCR en el Aeropuerto de Madrid-Barajas.
La multirreincidencia como objetivo prioritario
Estas expulsiones suponen una gran coordinación a nivel policial, judicial, además de una estrecha relación a nivel documental con los respectivos consulados, ya que se solicitaron las autorizaciones judiciales de las causas que estas personas tenían pendientes en los diferentes Juzgados, así como la realización de los trámites de documentación con los respectivos consulados para que pudiera hacerse efectivo el decreto de expulsión.
La “multirreincidencia” es un objetivo prioritario de todos los cuerpos policiales ante ciudadanos que desprecian todos los valores sociales, atacan la seguridad y la libertad y han hecho de la delincuencia su modo de vida.