Urbanismo
Las mercancías peligrosas por la AP-7 obstaculizan el hub de fútbol de Tarragona
El Ayuntamiento no ve con buenos ojos la propuesta y no descarta paralizar la concesión de licencias tras la aprobación inicial del POUM. El proyecto genera recelo

Imagen del entorno de Llevant en el que Tarraco Esports quiere construir el hub de fútbol.
El proyecto del hub deportivo de La Planota no tendrá un camino fácil. No tan solo por la oposición que se ha generado a nivel vecinal, político y entre las entidades medioambientalistas, sino también por las dificultades técnicas de la propuesta que se plantea. Así lo revelan los primeros informes preceptivos que han solicitado los promotores y que ha recibido el Ayuntamiento de Tarragona.
Es el caso del informe de Carreteras, el cual hace una valoración «desfavorable», teniendo en cuenta que el paso de mercancías peligrosas por la AP-7 afecta a elementos vulnerables, como pueden ser los niños, y, por tanto, se tiene que estudiar bien las franjas de seguridad que requiere una instalación de estas características. «Lo que me dicen los técnicos es que el proyecto no está tocado y hundido, pero sí que es una cuestión que limita mucho lo que pretende hacerse y que plantea cambios respecto a lo previsto», dice el concejal de Territori del Ayuntamiento de Tarragona, Nacho García Latorre.
La inversión está despertando un gran rechazo, ya que esta afecta a unos terrenos de unas 33 hectáreas en el municipio de Tarragona, en el límite con El Catllar. En concreto, quiere construirse entre seis y nueve campos de fútbol en unos terrenos no urbanizables de la Anella Verda sobre los que se hizo un cambio de uso. Según el POUM de 2013, y las normas subsidiarias urbanísticas, están catalogados con la clave ‘d’, lo que abre la puerta a la instalación de equipamientos deportivos.
Residencia para deportistas
El promotor es Tarraco Esports, una sociedad que plantea una inversión de 5 millones de euros, en un espacio de antiguos campos de cultivo que era del Arquebisbat de Tarragona. Más allá, también se incluye la recuperación del Mas de la Creu como casa de colonias para estancias deportivas.
No nos gusta el lugar ni un proyecto de estas dimensiones, pero estamos obligados a tramitarlo», Nacho García Latorre
«El camino no será fácil y lo estamos comprobando», asegura el responsable municipal. La administración local está a la expectativa de los informes tanto del ACA como de Bombers y las sensaciones no son buenas. El acceso se prevé a través de un vial que afecta al Barranc de la Móra. Además, los campos de fútbol se construirán en una superficie rodeada de vegetación, lo que complica la evacuación en caso de un gran incendio o de lluvias torrenciales.
El Ayuntamiento de Tarragona asegura que de momento no ha recibido un proyecto como tal, sino un borrador, y que se están tramitando los informes preceptivos para la licencia. «No nos gusta y no lo escondemos», argumenta el cuarto teniente de alcalde. La ubicación y las dimensiones, así como el gasto en agua y los problemas de movilidad o inundabilidad que pueden generarse son algunas de las cuestiones que la administración local no ve con buenos ojos. Pese a ello, este indica que «nuestra obligación es tramitar el proyecto, en tanto que sea compatible».

Mapa de ubicación de La Planota
En julio del año pasado la plataforma en contra del proyecto presentó una moción al pleno de Tarragona, que fue aprobada con la abstención del PSC y Junts per Catalunya y los votos en contra de los concejales del PP. En esta se pedía una suspensión temporal en la concesión de licencias, teniendo en cuenta que las instalaciones deportivas se construirán en el ámbito de la Anella Verda, que quiere protegerse con el nuevo plan general que se está tramitando. «Pedimos que se haga efectiva esta suspensión durante un periodo de dos años, mientras no se apruebe el nuevo POUM», defiende el portavoz de la plataforma Andreu Fernández.
Esperar la aprobación inicial
El colectivo asegura que un informe jurídico del secretario, que solicitaron a través de ERC, avala esta posibilidad por un periodo de un año y de otro adicional. Pese a ello, el gobierno municipal no quiere jugar aún esta carta. «Si suspendemos ahora, como entre la aprobación inicial del POUM y la final pueden pasar varios meses es probable que aquello siga adelante y que nos quedemos sin ningún mecanismo para frenarlo, porque se habrán agotado los plazos antes de la entrada en vigor del nuevo plan», argumenta García Latorre.
El ejecutivo municipal es partidario de esperar esta aprobación inicial del POUM (que está prevista para finales de año) y a partir de ahí tramitar esta moratoria. «De esta forma puedes tener dos años de suspensión, en lugar de uno», indica el edil socialista.
La plataforma contraria al proyecto asegura que hay muchos aspectos que no encajan. «Nos dicen que las instalaciones beneficiarán a los alumnos del Col·legi Sant Pau, pero después contemplan un aparcamiento de más de 500 plazas y un aforo para 2.000 personas, y si es para los niños del colegio, por qué necesitan una residencia», argumenta Fernández. El colectivo se está reuniendo las partes para exponer las dudas y conocer al detalle los informes que se están tramitando.
Al no estar en nuestro territorio no podemos entrometernos, pero no lo queremos», Xavier Canadell
«El proyecto está lleno de datos que no están soportados por ningún análisis ni estudio, pero van cubriendo el expediente según les van pidiendo», indica Fernández. Este exige al Ayuntamiento que estudie los informes «con lupa», ya que «es un proyecto que tiene una gran afectación». «Aquí tendrá mucho que decir el ACA porque quieren verter el agua depurada al Barranc de la Móra, que es un corredor natural sobre el que ya vierte su agua la depuradora de El Catllar, la escuela inglesa y el nuevo instituto que se está construyendo», argumenta Fernández.
¿Mas d’en Sorder 2?
La plataforma teme que los promotores quieran tramitar el proyecto antes de que se haga esta aprobación del POUM que protegerá de forma definitiva los terrenos. «El modelo que ya se intentó con Mas d’en Sorder, que ya lo paralizaron, está reviviendo de nuevo a pesar de las amenazas del cambio climático», lamenta este activista.
El Ajuntament del Catllar va de la mano de la plataforma. Así lo afirma su alcalde, Xavier Canadell, quien explica que «al no estar en nuestro territorio tampoco podemos entrometernos, pero no queremos que se haga un macroproyecto de estas características e intentaremos evitar todo lo que pase por Parc Llevant». Este defiende su preservación como Anella Verda.
Por su parte, las plataformas medioambientalistas agrupadas bajo el paraguas de SOS Costa i Camp de Tarragona defienden que La Planota «forma parte del mosaico agroforestal de la Anella Verda, lo que significa que tenemos una masa forestal que rodeará el complejo que puede ser catastrófico si se produce un incendio forestal como el que hemos visto en Paüls», argumenta Lluís Estamariu.
Las entidades plantean que se ubique en Ponent, junto al Anillo Mediterráneo
Estas entidades explican que han intentado reunirse con los promotores, pero que no los han recibido. Tampoco el Arquebisbat de Tarragona. «Pedimos que se cumpla con la moción que se aprobó y que el Ajuntament de Tarragona se reuna con los promotores para ofrecerles una nueva ubicación», afirma Estamariu.
Este era uno de los puntos que se incluía en el texto que pasó por el pleno, ya que estas entidades defienden que un proyecto de estas características podría encajar en el ámbito del Anillo Mediterráneo, donde el Nàstic ya tiene su ciudad deportiva y quiere generarse un hub deportivo vinculado a las instalaciones de los juegos.
«No creo que nos corresponda al Ayuntamiento ofrecer otros espacios que sean municipales y si esta opción no sale, que será muy difícil, ya buscarán alternativas», argumenta García Latorre. Este asegura que tan solo se ha reunido en una ocasión con los promotores y de esto hace un año.
Tanto la plataforma en contra del proyecto como SOS Costa i Camp de Tarragona defienden que esta inversión no tiene cabida en el ámbito de Llevant y cuestionan que en su momento se hiciera este cambio de usos de los terrenos.