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Cinco personas –cuatro hombres y una mujer–, de entre 24 y 42 años, han sido detenido por los delitos de pertenencia a grupo criminal, salud pública y defraudación de fluido eléctrico. Supuestamente eran los responsables de una plantación de marihuana en Els Pallaresos
La investigación se inició a mediados del pasado mes de noviembre cuando los Mossos d’Esquadra tuvieron conocimiento de que había conexión entre una nave industrial en desuso de Els Pallaresos y en un chalet de una urbanización tarraconense donde se estaba cultivando marihuana.
De la investigación se desprende que los jefes de la organización –tres de los detenidos–, vivían en dos pisos del Baix Penedès desde donde supervisaban discretamente con visitas esporádicas ambas plantaciones.
En cada una de las plantaciones había otro miembro de la organización que realizaba labores de jardinero y no le estaba permitido salir del recinto asignado para evitar levantar sospechas con el vecindario.
Estos cuidaban la plantación y su principal cometido era la de construir las estancias, modificar la estructura de los inmuebles, realizar el seguimiento y control del crecimiento de las plantas con los correspondientes abonos y fitosanitarios, recolectar y pesar la droga así cómo vigilar la droga ante posibles robos.
En este sentido, los jefes de esta actividad criminal alquilaron el chalé y la nave industrial. Utilizaron identidades falsas y testaferros con el desconocimiento de los legítimos propietarios.
Por todo ello, durante la madrugada del pasado jueves se realizaron cuatro entradas simultáneas en los inmuebles vinculados a la organización.
En los dos domicilios investigados del Baix Penedès detuvieron a tres personas –dos hombres y una mujer– y comisaron 35.000 euros en efectivo, dos vehículos y terminales móviles.
En la entrada y registro en los dos puntos de cultivo localizaron un total de 1.132 plantas de marihuana en avanzado estado de floración, 6 compresores de aire acondicionado, 200 focos con sus respectivas lámparas, 206 transformadores, 60 ventiladores, 26 filtros de aire, material de pesaje y embalaje, diversos aparatos de telefonía y documentación personal.
Una vez finalizadas las dos entradas, técnicos de la empresa de suministro interrumpieron el suministro eléctrico que estaba conectado de forma fraudulenta.
Los cinco detenidos pasaron el sábado a disposición judicial y el juez decretó por todos ellos su ingreso en prisión.
