La empresa que gestiona el servicio de la basura tensa (aún más) la cuerda. Con la huelga de Reus del 2024 todavía muy presente en la memoria, la compañía FCC alerta a los operarios de la basura con la aplicación de expedientes sancionadores «de sueldo y empleo» si se detectan trabajadores que «manipulen vehículos» para forzar un parón «encubierto» del servicio.
La útima reunión del pasado viernes entre comité de empresa, FCC y Ayuntamiento para intentar desbloquear la aplicación del nuevo convenio laboral –que prevé incrementos salariales del 3,5%– acabó sin acuerdo, la misma suerte que sufrió la mediación en el Tribunal Laboral de Catalunya. FCC exige al consistorio garantías de que será la administración municipal la que asumirá el gasto, de unos 380.000 euros.
A raíz de ello, los representantes de los empleados anunciaron que solo trabajarán con vehículos que estén «plenamente operativos», sin usar maquinaria que tenga defectos o alteraciones de importancia «en los frenos, la dirección o las luces» o que se encienda el botón rojo de «cualquier indicador del cuadro de instrumentos».
De hecho, ayer, a primera hora de la mañana, una decena de los vehículos previstos inicialmente para el servicio de este lunes se quedaron en el taller, tras considerar los operarios que no se encontraban en óptimas condiciones. Según las fuentes consultadas, a media mañana siete de estos vehículos ya pudieron ser utilizados mientras que los otros tres se quedaron sin poder usarse.
«Iremos día a día»
El posicionamiento de los trabajadores ha activado todas las alarmas en la firma gestora, FCC, que denuncia una situación «crítica». «Haremos todo lo posible para sacar el servicio con normalidad, pero por desgracia no se puede asegurar nada. Iremos viendo día a día», indican fuentes de la empresa, las cuales detallan al Diari que «intentaremos reforzar el trabajo de taller con servicios externos, pero en estos momentos también los tenemos saturados con averías de larga duración». Desde el Ayuntamiento de Tarragona se indicó ayer que la jornada transcurrió «con normalidad», «sin incidencias remarcables» en el servicio.
Según un informe elaborado por el Departament de Neteja Pública del consistorio, cada día «entre un 20% y un 40%» de los vehículos están averiados, recalcando que la antigüedad media de la flota actual es de «unos 16 años», con muchos de ellos superando su «vida últil».
El análisis detalla que, precisamente por la larga trayectoria de la maquinaria, «hay averías de manera muy frecuente, con numerosas alteraciones en los servicios» que afectan, de media, entre 30 y 60 vehículos de los 150 que hay en la actualidad».
A raíz de ello, FCC afirma tener alquilados «21 o 22 máquinas», algunas de las cuales proceden de otras contratas de la empresa. «El Ayuntamiento solo nos paga una, cuando el gasto es de 100.000 euros mensuales», se resalta desde la compañía. Fuentes del comité de la basura indican que estos vehículos «tampoco son nuevos» y que cuentan con «desperfectos».
La UGT presiona al comité
Tras la baja de siete representantes del comité de empresa de la UGT, ahora independientes, el sindicato reclama elecciones. «El comité resultante no tiene un objetivo definido, ya no sabe qué decir ni qué hacer. Prometió a los trabajadores un convenio que no ha sabido aprobar, y ahora se aferra al poder por intereses lejanos a los de la plantilla. Lo sensato y democrático sería convocar elecciones sindicales para dar paso a nuevos representantes», se indicó ayer al Diari desde la UGT.
Los trabajadores realizaron ayer una asamblea, en la que el comité explicó las negociaciones con la empresa y la mediación del Ayuntamiento y del Tribunal Laboral. De momento, no hay previsto ningún nuevo contacto para desencallar un conflicto que no tiene visos de dar ningún avance hasta que el tribunal administrativo dictamine si el concurso debe activar la tecla F5 para actualizarse o si, por el contrario, debe resetearse todo el proceso desde el momento cero.