Peste porcina africana
Aumentan a 52 los jabalíes muertos localizados por el brote de peste porcina en Barcelona
Hallados dos nuevos ejemplares dentro del perímetro de alto riesgo en Cerdanyola del Vallès mientras los equipos refuerzan el precintado para evitar la expansión del virus
Dos agentes de los Agents Rurals inspeccionan los bosques con ayuda de un dron.
Los equipos que inspeccionan el entorno rural afectado por el brote de peste porcina africana (PPA) en la provincia de Barcelona han localizado en las últimas horas otros dos jabalíes muertos. Con estos hallazgos, ya son 52 los animales encontrados sin vida dentro del perímetro delimitado alrededor del foco declarado en Cerdanyola del Vallès.
El jefe del área de Barcelona de los Agents Rurals, Jaume Torralba, ha confirmado este viernes que los cuerpos aparecieron dentro del radio de seis kilómetros que conforma la zona de alto riesgo.
Hasta la fecha, los análisis han determinado que 13 de los 52 jabalíes fallecieron a causa del virus. Las muestras de los dos últimos ejemplares se enviarán ahora al laboratorio de referencia de Madrid para confirmar si también fueron víctimas de la PPA.
Torralba ha detallado que este jueves concluyeron los trabajos en el primer perímetro, el más próximo al foco, y que este viernes se ha iniciado la revisión del segundo anillo de vigilancia, de 20 kilómetros. En estas labores han participado cerca de 400 efectivos de distintos cuerpos, apoyados por catorce perros especializados. Los Agents Rurals estudian incluso extender los trabajos más allá de los límites establecidos inicialmente.
El operativo da por finalizada la fase principal de actuaciones en el primer perímetro, donde se han precintado posibles puntos de escape para impedir que los jabalíes puedan salir hacia zonas de menor riesgo. Según Torralba, en esta área todavía quedan animales vivos, probablemente ya infectados, y se estima que alrededor del 75 % podría morir en los próximos días. Este escenario, explica, contribuiría a contener la propagación del virus.
“Lo mejor es molestarlos lo mínimo posible para evitar movimientos innecesarios”, ha señalado el responsable de Agents Rurals, subrayando que el objetivo es que los animales enfermos permanezcan en la zona precintada y no contribuyan a la expansión de la PPA.
Torralba ha añadido que es difícil prever cuándo morirán estos ejemplares, dado que la evolución del virus depende de múltiples factores. Hasta entonces, los equipos continuarán vigilando el perímetro para garantizar que la enfermedad no traspasa las zonas establecidas.