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Las medidas aprobadas por la Generalitat para contener el avance de la pandemia de Covid-19 siguen afectando al tejido comercial de Salou. El Ayuntamiento, junto con asociaciones de empresarios de la zona, manifestaron ayer, una vez más, su indignación al mismo tiempo que anunciaron protestas contra dichas medidas. Las directrices autonómicas obligan a los comercios a cerrar a las 22h, algo que afecta especialmente a Salou, ya que la actividad del municipio en temporada turística se prolonga, habitualmente, hasta pasada la medianoche.
Es por ello que ayer, en una rueda de prensa a la que acudieron representantes consistoriales y de asociaciones empresariales, se anunciaron acciones de protesta. El Ayuntamiento, a partir de mañana, iluminará en señal de protesta la fachada del consistorio con los colores de la bandera de Salou mientras dure esta situación de cierre.
Por su parte, Laura Capuz, vicepresidenta de la asociación Shopping Salou Comerciants i Empresaris, desaprobó las «devastadoras» medidas, que «discriminan» a Salou. Capuz consideró que, mientras otros municipios no se ven afectados, «en Salou el horario comercial ‘potente’ se da despues de cenar, cuando ha acabado la jornada de playa, por lo que nos encontramos con que, cuando empiezan a llegar clientes, tenemos que cerrar». A modo de protesta, los comercios dejarán sus luces encendidas durante unas horas a partir de las 22h, para reivindicar que los comercios querrían estar abiertos esas horas. Asimismo, en la entrada de los establecimientos se colocará un cartel con el mensaje «La Generalitat no os deja entrar».
El alcalde, Pere Granados, comentó que el miércoles tuvo una reunión con la Delegada del Govern que fue «positiva», si bien «el contenido en cuanto a las decisiones tomadas por el Govern no nos satisface», lamentó el alcalde. Como ya ha hecho en repetidas ocasiones, Granados criticó que esta medida «no se acoge a criterios científicos», e insistió en que «el comercio no ha sido foco de contagio» al mismo tiempo que alabó la labor del sector para adaptarse a la situación sanitaria. Por otra parte, Granados protestó también por el cambio de criterio de la Generalitat al imponer el toque de queda a un municipio. Desde esta semana, para que se aplique dicha medida, la Incidencia Acumulada de los últimos siete días (IA7) debe superar los 250 puntos, cuando anteriormente el límite estaba en los 400. Según la información oficial de la Generalitat, Salou tiene una IA7 de 267 puntos.
Indignación en PIMEComerç
En la rueda de prensa estuvo presente el presidente de del consejo territorial de PIMEComerç (Petita i Mitjana Empresa de Catalunya) Tarragona, Florenci Nieto, que calificó la situación actual de «esperpéntica». Nieto se mostró muy crítico con la situación actual, asegurando que «se están poniendo palos en las ruedas a la recuperación económica de nuestros municipios. Se están cebando demasiado y están dando al comercio un castigo brutal».
El representante de PIMEC cargó directamente contra la Generalitat: «deberían demostrar su preparación actuando de otra manera». Por su parte, Nieto agradeció a Granados por «volcarse con el comercio de su ciudad, cosa que no han hecho muchos otros alcaldes», y calificó la actuación del alcalde como «inteligente, propia de una persona comprometida con su ciudad y con su crecimiento».
