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Roberto Torres: «Si no subimos, puede que decida retirarme»

El futbolista navarro es uno de los jugadores llamados a marcar la diferencia en el play-off. Quiere subir, pero si no lo consigue no descarta la retirada

28 mayo 2025 18:34 | Actualizado a 28 mayo 2025 21:12
Se lee en 3 minutos
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Roberto Torres (Navarra, 1989) es el futbolista de la plantilla del Nàstic de Tarragona con más bagaje en la élite. Una carrera de vértigo en la élite de la mano de Osasuna, club del que es leyenda. Ahora, el centrocampista que llegó procedente del Inter d’Escaldes en el mercado de invierno, quiere ser uno de los héroes de un posible ascenso grana. De momento, el camino empieza este sábado en la ida de las semifinales del play-off ante el Murcia. Un duelo de máximas pulsaciones en el que Roberto Torres jugará con esa naturalidad que le caracteriza. Desprende calma y eso es lo que necesita, entre otras cosas, el Nàstic para pasar de ronda porque hay partidos en los que el exceso de nerviosismo puede matarte.

No sé si es una temeridad preguntarle si está nervioso.

Nervioso nunca me he puesto. La verdad es que lo he llevado bien. Pero sí que es cierto que esto es un play-off. He jugado partidos muy importantes, pero play-offs solo uno, precisamente aquí. Y sí, es diferente. Durante la temporada puedes tener margen de error, hay partidos después. Ahora no: hay poco margen. Creo que empezar en casa es mejor. Siempre se dice que es mejor la vuelta en casa, pero yo pienso que, por la ilusión que se ha generado, con entradas agotadas y el equipo en un buen momento, jugar primero aquí puede ser muy importante.

Ha jugado un único play-off, con Osasuna, el equipo de su tierra. ¿Cómo lo compara con este momento?

Es distinto, claro. Aquello era mi casa, mi gente. Pero aquí estoy muy a gusto. Vine al Nàstic para ascender, me encuentro muy bien y creo que ha llegado el momento de lograrlo. La ilusión que hay en el vestuario y en el entorno es enorme. Y en lo personal, no sé qué pasará después del verano. Si subimos, tengo contrato. Si no, puede que decida retirarme. Así que quiero disfrutar esto al máximo, porque puede que quede poco. Pero si lo logramos, jugar un año más en Segunda también sería un gran aliciente.

¿Entonces se plantea la retirada si no se sube?

Podría ser. Nunca hay nada seguro, porque el verano es largo y el mercado siempre sorprende. Pero he vivido ya mucho, estos dos últimos años y medio he estado fuera de casa, lejos de mi familia, y eso pesa. Estuve en Irán, ahora aquí, y aunque estoy genial físicamente, valoro también otras cosas. Hay compañeros que me dicen que cómo voy a retirarme si estoy muy bien... Y sí, no es una decisión cerrada, pero la posibilidad está ahí.

Hay compañeros que me dicen que cómo voy a retirarme si estoy muy bien... Y sí, no es una decisión cerrada, pero la posibilidad está ahí

Muchos aficionados dicen que confían en ti, que este es el momento de jugadores como Roberto Torres. ¿Está de acuerdo?

Bueno, es algo que siempre se dice en estas situaciones: que es el momento de los buenos jugadores. Pero sí, creo que llego en un muy buen momento. Desde que llegué en febrero estoy aportando, y en este último mes me he sentido especialmente bien. Pero lo más importante es que el equipo, como colectivo, funciona muy bien. Nos ayudamos, entrenamos bien, y eso es clave. Si el grupo está fuerte, tenemos muchas opciones.

16 partidos ha disputaso (12 como titular) desde que llegó en invierno al Nàstic

Ante el Arenteiro ya se notó más y mejor la influencia de Luis César en el equipo.

Sí, lo comentamos en el vestuario. Con tan poco tiempo, en Segovia no se vieron muchas cosas. Pero contra el Arenteiro ya salieron muchas cosas que trabajamos. Nos sentimos más cómodos y eso, unido a lo que ya teníamos con Dani Vidal, creo que nos pone en un gran momento para afrontar lo más importante del año.

A nivel personal lleva ya tres titularidades seguidas. Frente al Arenteiro se vio uno de sus mejores partidos como enganche.

Me encontré bien y creo que di un buen rendimiento, pero para mí mi mejor partido fue el último de Dani Vida aquí ante el Lugo. A veces dar una asistencia o marcar hace que parezca que juegas mejor, pero sí, el otro día estuve a buen nivel. Estoy tranquilo y con muchas ganas de que llegue el sábado.

Se habla mucho de que el Nàstic no defiende bien, pero a veces no se destaca lo suficiente que son el mejor local y el más goleador. ¿Qué opina?

Lo comentamos entre nosotros. Hay mucha diferencia de goles a favor respecto al año pasado. Los de arriba estamos bien y eso da esperanza. Si mantenemos la portería a cero y defendemos todos, siempre vamos a tener ocasiones. Tenemos gol. Pero como dije antes, todo lo que hemos hecho no vale de nada si ahora no lo mantenemos.

El Murcia es el equipo menos goleado y el Nàstic el más goleador. ¿Eso puede decir algo sobre el transcurrir de los partidos?

El play-off es otra historia. Todo cambia. Hay que ir tranquilos y paso a paso. Si conseguimos un buen resultado en el Nou Estadi, podemos encarrilar mucho. Solo hay que pensar en eso.

Ha jugado ya en un Nou Estadi a reventar hasta en dos ocasiones, aunque lo ha hecho en contra. En uno el Nàstic ganó 1-0 con un golazo de Naranjo y en el segundo Osasuna eliminó a los granas en el play-off de ascenso a Primera. ¿Lo recuerda?

¡Claro! Recuerdo que era entre semana, de noche. Me cambiaron poco antes del gol, lo vi desde el banquillo. Un golazo por la escuadra. Y también jugué el play-off ese año con Osasuna, de día, con mucho calor y un estadio lleno. Un ambiente precioso. Y por eso les decía a los compañeros que ganar al Arenteiro con solvencia era clave. Lo encaramos de otra manera.

¿Qué ambiente espera el sábado? ¿Tiene ganas de que llegue ya el partido?

Muchas ganas. Vengo de jugar en Irán, con estadios llenos y mucho ambiente. En cambio, en Andorra apenas hay gente. Volver a vivir algo así, con un estadio lleno, con pasión, es lo que todo futbolista quiere. Los que son de aquí, ni te cuento la ilusión que deben tener. Y te lo digo yo, que he pasado gran parte de mi carrera peleando por no descender, incluso en Primera. Pero pelear por subir es precioso.

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