Un hombre que se enfrentaba a nueve años y medio de prisión por haber agredido sexualmente a su pareja ha sido finalmente absuelto por la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Tarragona. Los magistrados consideran que el cuadro probatorio presentado por la acusación resulta «manifiestamente insuficiente» a la hora de acreditar los hechos.
Para la Sala, ha quedado probado que el acusado –sin antecedentes penales y en situación regular en España– mantuvo una relación sentimental con la denunciante. Durante unos cuatro meses, con un breve espacio de convivencia en la localidad de Calafell.
El 28 de agosto de 2017, ambos estuvieron juntos en la playa en compañía de otra pareja. Posteriormente se desplazaron al domicilio de esta. Allí se produjo una discusión entre la denunciante y el acusado, que continuó en el exterior del domicilio. La mujer volvió a su casa en compañía de esta pareja de amigos.
Ese mismo día o con anterioridad, el acusado y la denunciante habían mantenido relaciones sexuales.
El fiscal pedía para el procesado, además de la pena de prisión por un delito de agresión sexual, seis de libertad vigilada y que durante 11 no pudiera comunicarse ni acercarse a menos de 500 metros de la mujer. También acusaba al hombre de dos delitos de maltrato sobre la mujer, pidiendo por cada uno de ellos diez meses de prisión, además de tres años y ocho meses con orden de alejamiento.
La mujer, durante
el juicio, mostró una firme voluntad de
no querer declarar
el juicio, mostró una firme voluntad de
no querer declarar
En la sentencia, los magistrados recuerdan que la denunciante desde un inicio mostró una firme voluntad de no querer declarar. No ofreció, según el tribunal, información acerca de los hechos juzgados. Manifestó, en reiteradas ocasiones, que no recordaba lo que se le estaba preguntando. No sabía cuánto tiempo habían estado juntos. Sí que recordó que él le acogió en su domicilio, aunque no sabía si era un piso o una casa, ni tampoco si dormían juntos. Dijo que no había mantenido relaciones sexuales con el acusado antes de la denuncia.
La testigo no describió ninguna acción sexualmente agresiva del acusado, «pareciendo desprenderse de su relato que no se produjo ninguna agresión de tal naturaleza». Tampoco describe dos episodios de malos tratos. Todo ello impide a la Sala una condena del acusado.
La sentencia también recalca que la declaración de la denunciante «no fue nada descriptiva, siendo constantes las faltas de recuerdo de la testigo, negando haber mantenido cualquier tipo de relación sexual con el acusado, resultando ello incompatible con la prueba pericial biológica de análisis de restos biológicos y comparativa de ADN practicada en el plenario».
Pero la declaración de la mujer es contraria a las pruebas recogidas por los Mossos d’Esquadra. Las pruebas biológicas determinados la presencia de semen en la mujer. Ello corroboraría la declaración del acusado, quien manifestó que entre cinco y siete días antes de la recogida de muestras había mantenido relaciones sexuales con la denunciante.
